Por: Redacción Vida y Estilo • Colombia.com

Oración a la Virgen de las Nieves para necesidades urgentes

La Virgen de las Nieves puede atender tus súplicas y ayudarte ante necesidades de gran urgencia, solo debes encomendarte a ella con esta poderosa oración.

Ante necesidades muy urgentes, esta es la oración que podría ayudarte. Foto: Shutterstock
Ante necesidades muy urgentes, esta es la oración que podría ayudarte. Foto: Shutterstock

La Virgen de las Nieves puede atender tus súplicas y ayudarte ante necesidades de gran urgencia, solo debes encomendarte a ella con esta poderosa oración.

La Virgen de las Nieves es una popular advocación mariana que se conmemora cada 05 de agosto, la cual nació luego de que la Virgen María se apareciera frente a una pareja que no había podido tener hijos y quue pedía ayuda divina para recibir sabiduría y poder decidir qué hacer con su herencia o fortuna; la Madre de todos les pidió construir una basílica en su nombre donde ella les indicara con nieve.

Este mismo mensaje lo recibió el Papa Liberio, por lo que la mañana del 05 de agosto este hombre y la pareja se dirigieron al lugar donde había caído nieve, a pesar de que el rayo del Sol era evidente y era el mes de agosto; en dicho terreno se inició la obra, la misma que concluyó un año después con la financiación de aquella relación.

No mucho tiempo la Iglesia desapareció, pero el Papa Sixto III la reconstruyó en el año 434, conservándose hasta ahora como la Basílica de Santa María la Mayor. Si tienes una necesidad urgente, puedes encomendarte a la Virgen de las Nieves con la oración que te enseñamos a continuación, compartida por el portal ‘Oraciones de los Santos’.

Oración para necesidades urgentes

Amabilísima Reina y bendita Señora de los Ángeles, María Santísima de las Nieves, salud de los enfermos, consuelo de afligidos, alegría de los tristes, refugio de pecadores y universal amparo de todos vuestros devotos; a vuestros sagrados pies, Madre Clementísima, se postra rendida un hijo-a vuestro.

Necesitado-a vengo de todo consuelo y amparo, y puesto os dignasteis dulcísima Señora, manifestar vuestro benignísimo rostro en vuestra prodigiosa Imagen, a quien todos veneramos con el título de las Nieves, y que hallada en un pozo de cristalinas y puras aguas, expresáis en ella vuestras bondades y misericordias, otorgando desprendidamente y con piedad innumerables favores a vuestros devotos, obrando a nuestro favor raros prodigios y maravillas.

Por todo ello, hoy os llamo y humilde os pido, Señora, me alcancéis de los Cielos este favor que me es tan necesario para salir de mis problemas y no tener infelicidad en mi vida y en mi hogar: (haz ahora con esperanza la petición).

María Santísima de las Nieves, os pido con todo mi ser tengáis a bien auxiliarme, acoged la súplica de este-a siervo-a necesitado-a, que clama a vuestra gran comprensión y que con plena confianza se acerca a vos, ponedla dentro de vuestro Inmaculado Corazón y llevadla ante el Señor, todo compasión y misericordia, para que con celeridad sea remediada y así recupere la dicha y la tranquilidad que tan necesarias me son para no sufrir más.

Virgen de las Nieves, Madre de manos generosas, Madre de amplio y espléndido corazón, llenad mi vida con vuestra santa bendición. Tú que estas llena de indulgencia y afabilidad, con gran confianza solicito también que os dignéis por vuestra clemencia alcanzarme de vuestro amado Hijo y mi Dios, fe viva, firme esperanza y caridad encendida, para que abrasada mi alma en el amor del bien sumo y limpio de todo afecto, logre por vuestra intercesión sean oídas mis súplicas en el Trono de la divina piedad e infinita caridad y adoraros eternamente en la Gloria.

Madre del Divino Amor, Tú que nos conduces a Jesús, fuente de gracia, y vienes a aliviar nuestro sufrimiento. Te imploramos con entera confianza: ayúdanos a seguir a tu amado Hijo con generosidad, y que pertenezcamos a Él sin reservas. Ayúdanos a darle la bienvenida al Espíritu Santo, que nos guía y nos santifica. Consíguenos la preciosa gracia de mirar a través de los ojos de Jesús, para que nuestra vida glorifique al Padre y contribuya a la salvación de nuestros hermanos. Por el mismo Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.