Si tienes más de 60 años, debes suplementarte con estas dos vitaminas

El cuerpo humano requiere una serie de nutrientes, vitaminas y minerales para funcionar adecuadamente y llevar a cabo múltiples procesos. La mayoría de estos se obtienen a través de una alimentación balanceada; no obstante, a edades avanzadas es probable que se requiera una suplementación adicional.

Profesionales de la salud destacan que a medida que envejecemos, nuestras necesidades nutricionales van cambiando drásticamente y es de vital importancia asegurarnos de obtener una cantidad adecuada, principalmente de vitaminas, para mantener una buena salud y promover un envejecimiento saludable.

Una de las más importantes es la vitamina B12, que es fundamental para el metabolismo de proteínas. También interviene en la formación de glóbulos rojos en la sangre, que transportan oxígeno por todo el cuerpo y al mantenimiento del sistema nervioso central, previniendo enfermedades como ma anemia megaloblástica. 

Según expertos de la Clínica Alemana, “entre un 5 y 15 por ciento de las personas adultas padece insuficiencia de la vitamina B12, déficit que se desarrolla lentamente y que es más común según avanza la edad”.

En la mayoría de casos esta deficiencia se pasa por alto debido a que presenta síntomas muy parecidos a los de muchas enfermedades relacionadas con la edad. La importancia de la vitamina b12 radica en la prevención de enfermedades neurológicas y de la sangre.  

“En la sangre previene la anemia megaloblástica y a nivel cerebral contribuye al equilibrio de los síntomas parestésicos (hormigueo) de las extremidades. Cuando existe déficit severo y prolongado de vitamina B12, afecta el sistema nervioso central provocando problemas de memoria y concentración. Incluso, cuando es excesiva la carencia, se han visto casos de demencias”, explica el doctor Marcelo Blacutt, geriatra de Clínica Alemana. 

Otra de las vitaminas esenciales para los adultos mayores es la D, que contribuye con la salud del corazón. Según un estudio realizado por el Instituto de Investigación Médica QIMR Berghofe, en Australia, el consumo de suplementos de vitamina D en mayores de 60 años reduciría el riesgo de accidentes cardiovasculares graves. 

Por otro lado, de acuerdo con un análisis de la Universidad de Chile, “hay estudios que indican que la vitamina D también podría ayudar a prevenir enfermedades neurológicas degenerativas, ya que se ha observado una asociación entre niveles bajos de este micronutriente y pérdida cognitiva”.