Por: Alexandra Méndez • Colombia.com

Racionamiento de agua: Bogotá podría decretar medidas más restrictivas

El alcalde Galán hizo énfasis en que la ciudadanía no estaría acatando las recomendaciones y las medidas podrían tornarse aún más restrictivas.

Bogotá podría tomar medidas más drásticas de racionamiento de agua. Foto: Shutterstock
Bogotá podría tomar medidas más drásticas de racionamiento de agua. Foto: Shutterstock

El alcalde Galán hizo énfasis en que la ciudadanía no estaría acatando las recomendaciones y las medidas podrían tornarse aún más restrictivas.

El pasado lunes 8 de abril, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, anunció el inicio de una campaña de ahorro de agua en la capital ante la baja capacidad de los embalses que abastecen la ciudad y sus alrededores con el Preciado líquido.

“Necesitamos lograr un cambio de comportamiento en los bogotanos que nos permita garantizar la prestación del servicio de agua potable en la ciudad para el corto y mediano plazo. El llamado es a ahorrar agua, para poder contar con el servicio en los próximos meses”, fueron sus palabras en dicho momento.

Entre las medidas, se determinó un racionamiento por sectores con el objetivo de limitar el consumo de los habitantes y de las empresas; sin embargo, parece que la medida no ha dado los resultados esperados, pues los embalses siguen bajando. 

Pese a que el consumo de agua en la ciudad ha bajado del promedio de 17 m3/s, ninguno de los días se logró el cumplimiento de la meta de reducir el consumo promedio de agua en la ciudad en 2 metros cúbicos por segundo (m3/s) hasta los 15 m3/s. 

Ante esto, el mandatario capitalino señaló que se deberán tomar medidas más drásticas, pues al paso que vamos acabaremos con el agua en reserva en un par de meses. “O bajamos el consumo o las medidas deberán ser más restrictivas. No se trata de guardar agua, sino de consumir menos”, señaló.

El alcalde manifestó que en los primeros días de racionamiento muchos sectores hicieron caso omiso a la invitación de ahorro minucioso. Incluso, algunas personas consumieron más agua, dado que días antes hicieron una gran reserva en contenedores y tanques. “Usar los tanques en los días de restricción es hacerles trampa a los embalses”, puntualizó Galán. 

Esta situación generó que en algunas localidades como: Antonio Nariño, Barrios Unidos, Chapinero, Los Mártires, Puente Aranda, Rafael Uribe, Santa Fe, Teusaquillo, entre otras, en vez de ahorro, hubiera un sobreconsumo hasta de un 60 por ciento.

Una de las medidas más drásticas para impulsar el ahorro forzado de agua es la imposición de multas ante el consumo excesivo. “Vamos a evaluar aquellos comportamientos que nos sean reportados, para determinar la viabilidad de posibles medidas como comparendos, multas, suspensión de actividad económica o llamados de atención pedagógicos”, dijo Galán.

En ese sentido, quienes desperdicien el preciado líquido lavando fachadas o vehículos, o contaminen fuentes hídricas con el arrojo de desperdicios tendrán multas de entre los 700.000 y el 1.200.000 de pesos, en caso de reincidencia. 

Adicional a estas multas, la Empresa de Acueducto de Bogotá emitirá un cobro adicional a todos los ciudadanos que excedan el consumo promedio de agua. “Vamos a analizar los consumos y se aplicarán las medidas de desincentivo al consumo en exceso a los usuarios que superen bimestralmente 44 metros cúbicos de consumo de agua, el cual se verá reflejado en la factura que llegue a los predios desde junio”, indicó la gerente del Acueducto de Bogotá, Natasha Avendaño.