Por: Juan Carlos García Sierra • Colombia.com

Joven salta de puente de 130 metros de altura en Bucaramanga y apenas sufre una fractura

A pesar de los ruegos de la gente un hombre saltó desde l viaducto de Bucaramanga, pero milagrosamente sobrevive con apenas una fractura en uno de sus brazos.

El Viaducto de Bucaramanga es una imponente y elevada construcción emblemática de la ciudad. Foto: Youtube
El Viaducto de Bucaramanga es una imponente y elevada construcción emblemática de la ciudad. Foto: Youtube

A pesar de los ruegos de la gente un hombre saltó desde l viaducto de Bucaramanga, pero milagrosamente sobrevive con apenas una fractura en uno de sus brazos.

El Viaducto de Bucaramanga es una de las estructuras más importantes de la ciudad capital del departamento de Santander por ser una arteria vial, pero también ha sido desde su construcción uno de los lugares predilectos para aquellos que contemplan acabar con su vida.

Un hecho calificado como milagroso ocurrió en el puente popularmente llamado como el Puente de La Novena cuando un joven de 24 años llegó hasta allí y se acercó a una de las barandas, lo que llamó la atención de conductores, transeúntes y testigos que de manera inmediata se inquietaron ante la posibilidad de que el hombre fuese a atentar contra su vida.

Mientras las personas alrededor del lugar se mantenían expectantes, pero a la vez angustiados ante la posibilidad de que el joven se lanzara al vacío, se dio aviso a las autoridades del suceso y algunas personas se acercaron para tratar de convencerlo de que desistiera de su idea, y al parecer, el atormentado hombre dijo que pretendía ponerle fin a su existencia porque lo agobiaban diferentes problemas personales.

El hombre, que vestía indumentaria informal, fue persuadido por extraños y también por algunos conocidos que llegaron hasta el lugar, pero este no quería ceder en sus intenciones por lo que se presagiaba un fatal desenlace.

No se tire

El joven, al que algunos llaman Marlon, se mostraba angustiado, y algunos conocidos le pedían no lanzarse al vacío y no causarle enormes tristezas a su mamá, pero también le advertían de lo malo que resultaría ‘hacer el trabajo de Dios’ porque así le estaría entregando su alma al diablo.

“Piense en su mamá, no se tire, no le regale el alma al diablo”, decían algunas personas que conocían al joven e intentaban convencerlo de no suicidarse.

Cuando muchos pensaban que el joven abandonaría sus pretensiones, este se mostraba muy decidido y ante las súplicas y ruegos saltó al vacío; algunos se apresuraron a observar su caída mortal y otros gritaban, se persignaban y elevaban plegarias al cielo.

El ambiente en el lugar era desolador y las lágrimas rodaban por las mejillas de quienes conocían al joven y también en aquellos impactados por tan terrible acto que acababan de presenciar, pasaron 15 minutos de completo estupor, cuando los Bomberos dieron la noticia de que habían llegado al lugar donde cayó el hombre de 24 años y lo encontraron inconsciente, pero vivo con apenas una fractura en el brazo.

Los Bomberos de Bucaramanga indicaron que el resultado del salto no fue mortal porque el joven cayó primero sobre la copa de un árbol, lo que hizo que su descenso fuese amortiguado.

Lo que se dice en la capital santandereana es que sencillamente al joven no le ‘tocaba’ morir todavía y esperan que reciba la atención necesaria para evitar que protagonice nuevos intentos de suicidio.