El mundo pide libertad de Langlois en Día de Libertad de Prensa

Aunque todo apunta a que el corresponsal del canal de televisión France 24 y del diario Le Figaro estaría en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), después de que una mujer que dijo ser guerrillera anunciara el martes que lo tienen como "como prisionero de guerra", no hay noticias de su paradero.

Un portavoz del Ejército de Colombia aseguró hoy a Efe que por ahora "no confirma ni descalifica" el supuesto comunicado de la guerrilla, en el que además se anunciaba que Langlois estaba herido, aunque no grave.

Mientras, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, señaló que el Gobierno "tiene claros indicios" de que el reportero está en poder de ese grupo guerrillero.

Hoy, con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa, se han sucedido los llamamientos a su liberación, entre ellos el del representante en Colombia de la Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), Todd Howland, quien expresó su "preocupación" por la suerte del periodista.

Reconoció que "podría encontrarse en poder de las FARC" y por eso urgió a la guerrilla a darle al reportero un "trato digno y a dejarlo en libertad", en el caso de que estuviera en su poder, "sin condiciones y de forma inmediata".

Desde Bruselas, la jefa de la diplomacia de la Unión Europea, Catherine Ashton, solicitó también la liberación "inmediata e incondicional" del francés e instó a las FARC a que "presten atención a la demanda del pueblo colombiano de una paz sostenible en el país".

Por su lado, la organización no gubernamental Reporteros Sin Fronteras (RSF) informó en París que ha recibido "de forma directa" la confirmación de que Langlois fue secuestrado por las FARC, grupo armado al que exigió que lo libere.

Según RSF, "el pasado 26 de febrero las FARC declararon de forma oficial que ya no tomaría como rehenes a civiles. La guerrilla deberá entonces cumplir su palabra liberando de inmediato a Langlois. Esta exigencia también responde a la necesidad de que el periodista reciba la atención médica que requiere".

En Francia, el caso Langlois se ha convertido en tema de debate electoral y el candidato presidencial socialista, François Hollande, se comprometió a hacer "todo lo posible" para lograr la liberación del periodista de 35 años si gana en las urnas el próximo domingo a Nicolas Sarkozy.

Hollande prometió no solo trabajar por la liberación de Langlois, sino por los nueve franceses que actualmente están secuestrados en el mundo, en partes como Colombia, Somalia, Yemen y el Sahel.

Mientras que la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el supuesto secuestro y recordó que los reporteros de guerra nunca pierden su condición de civiles, la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI), presidida por el Nobel de Literatura Gabriel García Márquez, también reclamó la inmediata liberación de Langlois.

El director de la FNPI, Jaime Abello, calificó en Bogotá de "insensatez" que las FARC puedan considerarlo un "prisionero de guerra" porque, recordó, "estaba ejerciendo una labor informativa".

Abello asimismo dejó claro que Langlois, un periodista afincado en Colombia desde hace varios años, ha trabajado tanto al lado del Ejército como de las FARC en la cobertura del conflicto armado, al destacar así su neutralidad como reportero de guerra.

En la misma línea se expresó la Asociación Colombiana de Editores de Diarios y Medios Informativos (Andiarios), que exigió "respetar la vida e integridad del periodista" tras reclamar su liberación.

Langlois fue visto por última vez con vida el pasado 28 de abril, cuando acompañaba a policías y militares en una misión antinarcóticos en el convulso departamento del Caquetá, con importante presencia de las FARC.

Hoy, en homenaje a este periodista, el Canal Capital, la televisión pública de Bogotá, emitirá un documental realizado por Langlois en el que se evidencia la resistencia pacífica de los indígenas del departamento Cauca en medio del conflicto armado colombiano.

Ovidio Castro Medina
EFE