Condenan a prisión a hombre en Italia por ser extremadamente tacaño con su esposa

Con un mundo en recesión económica y elevado costo de vida, ahorrar se ha vuelto más que una necesidad y casi que una obligación, pero lo que tiene a las puertas de la cárcel a un hombre es su obsesión con el ahorro, el cual imponía a su esposa de manera ilegal.

En la ciudad de Bologna, ubicada en el norte de Italia, un hombre obligaba a su esposa a ahorrar en extremo, solo le permitía adquirir productos en promoción y no estaba dispuesto a que el dinero se ‘despilfarrara’ en gastos innecesarios, tal era su desvelo por la economía del hogar que solo consentía una ducha semanal para su cónyuge.

Las denuncias de la mujer ante la justicia italiana llevaron a la corte a determinar que ella se encontraba ante una situación en la que la frustración y elevada ansia por el riguroso trato al que era sometida por su esposo la llevaba a un estado de sometimiento y agresiones.

Controlaba hasta el papel higiénico

Era tan grande la inquietud por el ahorro del esposo que solo autorizaba una exacta cantidad de papel higiénico que su esposa podía gastar, lo más curioso del asunto es que la pareja no padecía dificultad económica alguna, debido a que ambos contaban con aceptables trabajos y se logró determinar solvencia en el hogar.

El portal italiano especializado en asuntos jurídicos Cazzasione.net , según información recogida por EFE, confirmó que la sentencia indica que la mujer recibió maltratos físicos víctima de un sujeto ‘obsesionado con el ahorro’, además consideró que ese estilo de vida que debía padecer, sometida por su esposo, se había convertido en una coacción alimentada con agresiones y métodos estrictos de control.

La condena que el tribunal le dio al hombre fue de 1 año y 5 meses de prisión y recordó que la ley italiana, a través del Código Civil, consigna en su artículo 143 que "con el matrimonio, marido y mujer adquieren los mismos derechos y deberes con la obligación recíproca a la fidelidad, la asistencia moral y material y a la colaboración en el interés de la familia y la convivencia".

En la República italiana ya se habían presentado sentencias por casos en los que algunas personas habían sido juzgadas por ‘tacañas’ con sus parejas, así sucedió en el año 2000 cuando un tribunal falló en contra de un hombre indicando que "la persistente y sistemática conducta de un cónyuge dirigida a hacer insoportable la vida de su pareja, con una humillante e injustificada vejación y exasperada avaricia, entre la tipología del delito de maltratos familiares".