Feliz Navidad en diez idiomas: el Papa León XIV dio su primer mensaje desde El Vaticano

La Navidad en El Vaticano estuvo marcada este año por un hecho histórico, el primer mensaje navideño del Papa León XIV, pronunciado ante miles de fieles que se congregaron en la Plaza de San Pedro, pese a la lluvia y que disfrutaron de un hecho llamativo durante su intervención que se viralizó en redes sociales. 

Desde la logia central de la basílica, el pontífice impartió la tradicional bendición ‘Urbi et Orbi’, en el mismo lugar donde, el pasado 8 de mayo, se presentó oficialmente como nuevo líder de la Iglesia católica.

Uno de los momentos más aplaudidos ocurrió cuando el Papa sorprendió a los fieles con un saludo navideño pronunciado en diez idiomas. El gesto fue recibido con entusiasmo por quienes llenaron la plaza y por quienes siguieron la transmisión desde distintos lugares del mundo. El pontífice expresó su deseo de paz para las familias y los corazones de los creyentes, y luego replicó el mensaje en italiano, francés, inglés, alemán, español, portugués, polaco, árabe, chino y latín.

León XIV pidió por América Latina y las “guerras olvidadas”

Durante su primer mensaje de Navidad, el papa León XIV dedicó un espacio especial a América Latina. En su intervención expresó su deseo de que quienes tienen responsabilidades políticas opten por el entendimiento y eviten las divisiones ideológicas y partidistas. 

El llamado fue presentado como una invitación a construir consensos y a buscar soluciones que beneficien a las poblaciones más vulnerables.
Además del mensaje dirigido a América Latina, León XIV siguió la línea de su predecesor Francisco al repasar los principales conflictos que afectan al mundo.

En su reflexión navideña, pidió por la paz en Oriente Medio, Ucrania y otros territorios golpeados por la violencia armada, recordando a las poblaciones que viven bajo el impacto constante de la guerra.

El pontífice también elevó una oración por quienes sufren las consecuencias de conflictos menos visibles en la agenda internacional. Imploró “paz y consuelo para las víctimas de todas las guerras que se libran en el mundo, especialmente aquellas olvidadas; y para quienes sufren a causa de la injusticia, la inestabilidad política, la persecución religiosa y el terrorismo”. En ese contexto, Prevost mencionó de manera explícita a países como Sudán, Sudán del Sur, Malí, Burkina Faso y la República Democrática del Congo.