Por: Redacción Actualidad • Colombia.com

Militares de Burkina Faso dan golpe de estado y declaran el final del gobierno de Christian Kaboré

Un grupo de militares de Burkina Faso dan golpe de estado y declaran el final del gobierno de Christian Kaboré debido a que critican su falta de resultados ante la expansión de grupos yihadistas.

Mediante una transmisión televisiva los militares golpistas anunciaron el fin del gobierno civil en Burkina Faso. Foto: Twitter FedeRores
Mediante una transmisión televisiva los militares golpistas anunciaron el fin del gobierno civil en Burkina Faso. Foto: Twitter FedeRores

Un grupo de militares de Burkina Faso dan golpe de estado y declaran el final del gobierno de Christian Kaboré debido a que critican su falta de resultados ante la expansión de grupos yihadistas.

Burkina Faso, país de África occidental cercano a Malí, Costa de Marfil y Ghana, no posee costas, pero sí un extremo nivel de pobreza y una sed de poder de diversos sectores que siempre lo han mantenido en la incertidumbre sobre su estabilidad política.

Este país, antes conocido como Alto Volta fue una colonia francesa independizada en 1960 y el francés, a pesar de que solo el 15% de la población lo habla, es el idioma oficial del gobierno y con el que se realizan los negocios y transacciones comerciales.

En los últimos años Burkina Faso se ha visto afectada por la pugna de grupos yihadistas que se han querido hacer con el control de la nación, lo cual se ha traducido en violencia en los campos y ha dificultado a los gobiernos poder tener control sobre la situación.

Los militares de Burkina Faso han anunciado a la comunidad internacional que el gobierno del presidente Roch Marc Christian Kaboré llegó a su fin y una junta militar se encargará de llevar los destinos del país de poco más de 14 millones de habitantes.

Por medio de un mensaje televisado, los militares golpistas proclamaron el fin del mandato de Kaboré luego de un motín que se inició el domingo, también anunciaron que las fronteras serían cerradas y en un plazo razonable prometieron que retornaría el orden constitucional.

Los militares se alzaron en diferentes bases del país y exigieron la salida de la cúpula militar, pero especialmente, depusieron al presidente Roch Marc Christian Kaboré por su fracaso para contener a los grupos yihadistas que ganan terreno en el territorio.

Kaboré fue elegido primer mandatario en 2015 y su promesa de campaña se centró en contener la avanzada yihadista, pero luego de 6 años no logró su cometido, razón que motivó a una facción de las Fuerzas Militares de Burkina Faso a tomarse el poder, acción rechazada por la Organización de las Naciones Unidas.

Antonio Guterres, secretario de la ONU, condenó firmemente la acción y dijo que le interesa la protección y seguridad del depuesto presidente Kaboré en un golpe de estado.

El Movimiento del Pueblo para el Progeso (MPP) partido político al que pertenece Kaboré, denunció que el mandatario fue víctima de un intento de asesinato, que su residencia fue saqueada y que actualmente se encuentra detenido y se teme por su vida.

La zona geográfica a la que pertenece Burkina Faso se encuentra en una etapa de desestabilización, porque su vecino, Malí, ha sufrido distintos golpes de estado en periodos cortos de tiempo, desde el año 2020 ha tenido que verse inmerso en la lucha por el poder y en una pobreza asfixiante que ha hecho que muchos de sus pobladores busquen la suerte en otros continentes, especialmente en el europeo, pero tristemente han encontrado la muerte en su camino a causa de naufragios o a manos de bandas de traficantes.