A balazos se enfrentó un comerciante con ladrón que intentó asaltar su local en Jamundí

La inseguridad de la que son víctimas los tenderos en Colombia ha obligado a que muchos de ellos se armen para enfrentar a los ‘amigos de lo ajeno’ que se han convertido en un azote para los comerciantes, sin importar si sus negocios son grandes, medianos o pequeños.

La ciudad de Cali y el departamento del Valle del Cauca, hacen parte de las zonas colombianas con mayores índices de delincuencia, por eso un vendedor, armado ante un eventual robo, se enfrentó a tiros con un ladrón que quería atentar contra su negocio y el dinero que este produce.

En Jamundí, un dueño de un local de venta y reparación de licuadoras, no lo pensó dos veces y ante el intento de asalto se enfrentó al delincuente, que también se encontraba armado, entonces se inició un cruce de disparos entre el comerciante y el asaltante.

Una cámara de seguridad del local captó los momentos en los que los hombres se disparan casi de frente, mientras el delincuente está parado en la entrada del local, su dueño se esconde detrás del mostrador, y ambos accionan sus armas de fuego.

A plena luz del día un delincuente llegó hasta el local en Jamundí a bordo de una motocicleta, y sin quitarse el casco, para no ser reconocido, ingresa al local con un arma de fuego en una de sus manos, pero creyendo que lograría su cometido, no contaba con que un hombre desde el interior del local echara al traste sus aspiraciones delictivas.

El ladrón amenazó al propietario del local y le exigió que le entregara el dinero guardado como producto de la venta de repuestos, reparaciones y servicios técnicos, pero este de forma rápida apuntó al delincuente con un arma de fuego, entonces este salió del local, empujó su propia moto e inició un tiroteo; finalmente varios vecinos del lugar lograron neutralizarlo y entregarlo a las autoridades.

El ladrón recibió una dosis de ‘paloterapia’ por parte de los vecinos que lo retuvieron, y a la llegada de los elementos policiales, el hombre había recibido una buena cantidad de golpes, los cuales lo dejaron maltrecho.

Luego del hecho, las autoridades determinaron que ni el ladrón, ni el comerciante resultaron heridos como producto de su enfrentamiento a bala, pero el delincuente luego recibió una golpiza por parte de vecinos en enfurecidos por la situación de inseguridad, en donde hombres armados no tienen reparos en asesinar a quien oponga resistencia a sus asaltos.