Con la presencia de Petro, miles de ciudadanos despiden a los policías asesinados en Neiva
El evento contó la presencia del presidente Gustavo Petro, el ministro de Defensa, Iván Velásquez y el director de la Policía, general Henry Sanabria.
El evento contó la presencia del presidente Gustavo Petro, el ministro de Defensa, Iván Velásquez y el director de la Policía, general Henry Sanabria.
Con una emotiva ceremonia, miles de ciudadanos les dieron el último adiós a los policías que fueron asesinados el pasado viernes en la vía que conduce al corregimiento de San Luis, en Neiva, Huila. El presidente Gustavo Petro asistió al evento.
El jefe de Estado, quien no intervino en la ceremonia, estuvo acompañado por el ministro de Defensa, Iván Velásquez, así como por el director de la Policía, general Henry Sanabria; el gobernador del Huila, Luis Enrique Dussán, y el alcalde (e) de Neiva, Faiver Hoyos.
Los cuerpos de cinco de los siete uniformados masacrados fueron trasladados desde la funeraria San José a la iglesia de Neiva, donde cubrieron los féretros con banderas de Colombia en medio de homenajes de familiares de las víctimas y de miles de ciudadanos.
El evento religioso fue presidido por monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, obispo castrense de Colombia, quien llamó a proteger ante todo la vida, como propósito central para el desarrollo del país.
“Para que entendamos que sobre todo la vida humana es sagrada, que no podemos destruirla, y debemos unirnos todos para procurar la reconciliación y el crecimiento de nuestro país”, subrayó el prelado.
Entre tanto, los seres queridos de dos de los uniformados optaron por realizar ceremonias por aparte. Entre ellos está el intendente Luis Alberto Sabí, cuyas honras fúnebres se realizarán este miércoles en un templo de Neiva.
Gustavo Alberto Esquivel Rojas, el único sobreviviente
El auxiliar Gustavo Alberto Esquivel Rojas fue el único uniformado que logró sobrevivir a este atentado que cobró la vida de siete policías y generó conmoción, no solo en la institución sino en la ciudadanía.
Esquivel Rojas se lanzó del vehículo cuando sintió la explosión y, a pesar de estar herido, cargó a un compañero y recorrió 7 kilómetros, hasta esconderse en una alcantarilla. Lastimosamente, el otro uniformado que lo acompañaba falleció por la gravedad de sus heridas.
El auxiliar logró sobrevivir gracias a un campesino que lo acogió y le cambió la ropa para que los autores del hecho no lo reconocieran. Posteriormente, lo recogió el Gaula Militar Huila y lo trasladó a un centro asistencial en Neiva, donde continúa su proceso de recuperación.
Por su parte, Jesús María Esquivel, padre del patrullero, considera que es un milagro de Dios que su hijo haya podido sobrevivir a la tragedia. “Ellos ya habían tenido un altercado con los civiles y los habían amenazado”, dijo.
Esquivel afirmó que Gustavo Alberto le había contado sobre inconvenientes que había tenido en el pasado con la población. “Mi segundo hijo, un hijo muy educado, muy sencillo, la gloria de Dios que lo vuelvo a ver. Él siempre quiso ser un policía, me decía que estaba bien, que le tocaba muy duro estar en los entrenamientos”, agregó ante los medios de comunicación.