¿Cómo ayudar a un estudiante durante una crisis vocacional?

Dudar sobre la carrera que se ha elegido es una constante a nivel estudiantil, por eso la Fundación Universitaria del Área Andina realizó el conversatorio El papel de las competencias socioemocionales en estudiantes y docentes, en el que participó Yessica Martínez Soto, PhD en Educación de la Universidad Abierta de Tlaxcala, quien desarrolló los motivos que pueden generar crisis vocacionales y qué deben hacer los docentes para ser asertivos a la hora de tratarlas.

“La elección de carrera es equivalente a una elección de pareja cuando ya se quiere casar. Te casas con alguien pensando que es para toda la vida y la carrera es un ser y un dar que te acompaña.  Es sano que te preguntes”, afirmó la doctora durante la conferencia.

Te puede interesar:  Educación virutal, clave para acercar a docentes y estudiantes.

Muchos de los estudiantes, dice la experta, “no se van de una carrera por presión social, familiar y no toleran pensar en un fracaso escolar”. Para esto, lo ideal es ser consciente de la necesidad de “una confrontación con la realidad y definir: ¿qué voy a hacer ante esta situación?”.

Es cierto que a veces los estudiantes encuentran más apoyo en la universidad que en su casa y es ahí cuando los docentes tienen mucho por hacer, y desde el oficio, la orientación profesional es fundamental.

Dentro del planteamiento, la experta propone que los docentes puedan guiar a los estudiantes para identificar este punto: ¿Cuál es tu romance con tu carrera?

El romance es la fortaleza y el foco que les permitirá a los estudiantes entender y tomar decisiones a la hora de una crisis vocacional.

Además: Diez razones para hacer un posgrado en Nueva Zelanda.

Las Competencias socioemocionales, ¿para qué?

La relevancia de las Competencias socio emocionales, según Martínez Soto, van primero a nivel personal, escolar y profesional.

Pero es desde el primer ámbito de donde surge casi todo, “somos seres individuales que vivimos en un colectivo por tanto debemos aprender a relacionarnos con los demás en la medida del reconocimiento y regulación de nuestras propias emociones”. Es así como se logran con éxito las relaciones laborales, interpersonales, de amistad y de pareja.

En el ámbito escolar, un estudiante que se encuentra tranquilo, que está seguro y conoce sus debilidades y fortalezas puede reconocer en qué momento detenerse y pedir ayuda si lo requiere.

Y claro, en el ámbito profesional es clave la regulación emocional, porque, según relata Martínez Soto, “en el mundo laboral no solo buscan quién tenga el conocimiento sino quien sepa manejar sus emociones, que sea proactivo y no reactivo, que solucione y no que agrande el problema”.

Para que un estudiante pueda evaluarse si está en medio de una crisis vocacional, Martínez Soto destaca estas tres preguntas precisas que todo estudiante debe hacerse, guiado por sus docentes y que deberán responderse Sí o No.

-  ¿Estás dónde quieres estar?

- ¿Estás haciendo lo que quieres hacer?

- ¿Estás con quien quieres estar?

Si la respuesta es no, no es malo. “Tengo la opción de decir ni modo, pero la idea es que uno se mire y diga con razón me he venido sintiendo mal...¿Qué se debe hacer? Hablar, capacitarse, buscar una solución, salir de ahí”, concluyó la doctora en Educación.