Drogas La Rebaja pasa a manos del Estado: ¿Cómo funcionaría ahora?

Drogas La Rebaja, una cadena de farmacias reconocida en el país, pasa a manos del Estado colombiano desde este mes de noviembre. El Tribunal Superior de Bogotá reafirmó la extinción del derecho de dominio sobre la empresa y sus 880 establecimientos de comercio en julio. 

Al parecer, el Ministerio de Salud será el encargado de administrar la compañía creada por los hermanos Rodríguez Orejuela, la cual sirvió de fachada para lavar dineros durante los años 80 y 90 al cartel de Cali.

Con esta medida, se contempla la posibilidad de que Drogas La Rebaja obtenga registros sanitarios de medicamentos genéricos, algo que le resultaría bastante útil al sistema público de Salud en Colombia.

El caso de Drogas La Rebaja

Drogas La Rebaja consiguió un acelerado crecimiento gracias a los dineros obtenidos por negocios narcotraficantes de los hermanos Rodríguez Orejuela. Por tal razón, las autoridades nacionales e internacionales comenzaron a buscar una salida jurídica. 

En ese sentido, los entonces propietarios decidieron crear Copservir, una cooperativa que contaba con 4.100 trabajados. Sin embargo, cuando se logró determinar que la empresa estaba siendo controlada por capos del cartel de Cali se produjo la intervención en 2005. 

Dicho proceso se extendió a través del Ministerio de Hacienda por diez años y seis meses. En esos años, los Rodríguez Orejuela reconocieron que habían lavado más de 2.000 millones de dólares en las droguerías ante una corte de Estados Unidos en 2013. 

Cabe mencionar que desde la intervención de Drogas la Rebaja al 2020, el número de farmacias creció en 113%. De acuerdo con la revista Semana, sus ingresos rondaron por los $1,14 billones aproximados en el 2020 y en 2019 fueron $1,11 billones, superando a empresas como Johnson & Johnson Colombia o Sacyr Colombia.

Asimismo, la cadena de droguerías suma 7.600 trabajos directos, incluyendo 1.400 mensajeros que forman parte de los brazos del comercio electrónico. Por lo tanto, se espera que la empresa se convierta en un punto vital de suministro de medicinas tal y como lo son algunas cajas de compensación en Colombia.