Fiscalía envía a la cárcel a sacerdote por abuso sexual a niña de 7 años en Chocó

Pedro Pablo González Londoño, un sacerdote de 70 años de edad de la iglesia del municipio de Puerto Meluk, en el Chocó, fue judicializado por la Fiscalía Seccional de esa zona del país por presunto abuso sexual a menor de siete años de edad.

Al parecer, los hechos habrían ocurrido el 20 de octubre del 2022, cuando el sacerdote le dijo a la niña que se dirigiera a la casa cural para entregarle unos regalos, específicamente dulces y manillas. La menor fue acompañada de su hermana, otra pequeña de seis años.

De acuerdo con el expediente de la Fiscalía General de la Nación, la víctima fue atacada por el párroco en la cocina de la casa cural, luego de que él le entregara los regalos prometidos y le pidiera el favor de llevar un frasco a ese espacio del lugar.

“Se presume que estando solo con la otra niña le quitó la ropa, y la sometió a vejámenes. Cuando llegó a la casa la mamá notó algo raro en la ropa de la menor, así que la llevó a un centro asistencial en donde le contó a su progenitora lo que le pasó y posteriormente al médico que la atendió”, se lee en el comunicado del ente acusador.

González Londoño fue detenido por uniformados de la Policía Nacional en La Merced, en Caldas, lugar en donde nació. El sacerdote permanecerá privado de su libertad en un centro carcelario por solicitud de una fiscal de Itsmina, Chocó.

Este caso no sería el primero en el que se estaría involucrado Pedro Pablo González Londoño. En su contra existen dos anotaciones por el mismo delito en menores de edad. “El sacerdote cuenta con dos investigaciones más, una por un acto sexual contra un menor de 13 años, en el corregimiento de Bahía Cupica de Bahía Solano (Chocó), y otra por una tentativa de acceso carnal violenta a una turista en el mismo municipio”, resaltó la Fiscalía.

La situación preocupa a los miembros de la Iglesia Católica teniendo en cuenta el daño que generan los casos de pederastia. Uno de los hechos de este tipo que más generó conmoción fue el de Wilmar Quesada Pinto, un sacerdote de 45 años que aceptó su responsabilidad en el abuso sexual de dos niñas en el Tolima.

En agosto de 2022, el párroco fue condenado a pagar 22 años de cárcel por los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado, actos sexuales con menor de 14 años agravado y pornografía.

Quesada Pinto abusó de dos hermanas en repetidas ocasiones con tocamientos indebidos y realizándoles fotografías intimas a las niñas aprovechándose de que la madre dejaba a las menores en la casa cural. De acuerdo con la Fiscalía, los abusos habrían iniciado en el 2018.