‘Me quieren tumbar’: Gustavo Petro le respondió con pruebas a Álvaro Leyva tras sus últimas acusaciones

En la jornada del día de hoy, el excanciller Álvaro Leyva radicó un documento ante la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes, en el que reafirma todas las acusaciones en contra del presidente Gustavo Petro y sus supuestos problemas de adicción. Como consecuencia de esto, el mandatario respondió tajantemente, demostrando públicamente pruebas de lo que llegó a hacer en Chile, cuando presuntamente desapareció por varias horas.

Durante su relato, el presidente Gustavo Petro dejó en claro que no tiene problemas de alcoholismo como lo quiere hacer parecer Álvaro Leyva, ya que por un tema de gastritis y una operación realizada en Cuba no puede tomar en grandes cantidades. Además de esto, el mandatario resaltó que las pruebas de esto se encuentran en la Fundación Santa Fe, en la que está su historia clínica, documentos en los que se puede confirmar estos temas relacionados con su salud.

“Cuando lean mi historia clínica de la Fundación Santa Fe verán que voy allí, sobre todo por mi gastritis, y no por lo que dice el estafador corrupto (Álvaro Leyva)”. Por otra parte, Gustavo Petro comentó que el presidente Gabriel Boric le dio escolta constantemente, por lo que este también puede dar su declaración sobre las acusaciones presentadas por parte del excanciller, el cual, según el mandatario, solo ha dicho mentiras en su contra, siendo apoyado por la derecha en el país y los medios de comunicación.

Golpes van y golpes vienen

Por último, Gustavo Petro comentó que lo que en verdad quiere Álvaro Leyva y la derecha de Colombia es tumbar al presidente, el cual se ha encargado de acabar con ciertos negocios, aspecto que les ha pesado de la peor manera. Es por esto que, considera que todas estas acusaciones en su contra son juegos sucios, los cuales han sido manipulados directamente por la prensa y algunos partidos políticos que buscan tener nuevamente el poder en el país.

“Quieren tumbar al presidente porque le quitó el negocio de Thomas and Gregg, negocio en el que metió las manos, y por ello fue suspendido de por vida de la función pública; el mismo Hidalgo, al que perdoné, con enorme error mío, de ser uno de los posibles sobornados del cartel de los Rodríguez, motivo por el que se exilió en Costa Rica, ahora quiere demostrar con solo el chisme que padezco de una drogadicción inhabilitadora”.