Harold Echeverry confesó que asesinó a Michel Dayana y pidió perdón a su familia

Después de que Harold Echeverry Orozco, presunto autor de la muerte de la joven de 15 años Michel Dayana González en la ciudad de Cali fuese capturado en la ciudad de Villavicencio, ciudad a la que llegó para esconderse y en donde había tratado infructuosamente de vender una moto que había robado, confesó ser el autor del atroz crimen que mantiene consternada a la sociedad colombiana.

Sobre Echeverry Orozco recaían todas las sospechas, las que se agravaron después de que el seguimiento hecho a diferentes cámaras lo mostraba huyendo y para ello hurtó una motocicleta del taller en el que trabajaba en la capital del departamento del Valle del Cauca.

Una vez se conoció la noticia de su captura, la familia a de la joven Michel Dayana expresó su satisfacción por el hecho, y aunque esto no devolverá a su pequeña, esperan que todo el peso de la justicia recaiga sobre este criminal que actuó con sevicia y además ya tenía antecedentes por acoso y hostigamiento.

Harold Echeverry Orozco aceptó los delitos de feminicidio agravado, hurto calificado y agravado, por lo que un juez de control de garantías lo envió inmediatamente a una cárcel de la ciudad de Villavicencio.
 

El confeso asesino no se beneficiará con ninguna rebaja de penas debido a que el delito de feminicidio agravado no la tiene, por lo que el hombre podría recibir una sentencia de 60 años de prisión.

“Los elementos materiales probatorios y la evidencia física recaudados dan cuenta que el implicado, durante su turno de vigilancia en un taller automotriz, abordó a la menor, la incomunicó y luego la atacó. Posteriormente le causó la muerte, desmembró su cuerpo y lo ocultó en bolsas plásticas”, indico la parte acusadora.

Pidió perdón

Durante la audiencia de imputación de cargos, Harold Echeverry Orozco, de 40 años, no solo reconoció su crimen, sino que pidió perdón a la familia de la víctima y también al país.

El feminicida trató de varias maneras tener coartadas que lo libraran de la persecución de las autoridades, se dice que con la moto que hurtó del taller viajó hasta el municipio de Chicoral en el departamento del Tolima, allí se hizo pasar por mendigo y logró ganarse la ayuda de un grupo cristiano que le alquiló una modesta habitación para que pasara un par de noches.

Echeverry partió del Tolima hacia Villavicencio, lugar en el que contaba con algunos familiares a quienes pidió dinero prestado debido a que la moto que robó no pudo lograr vender.

La pena por feminicidio agravado podría ir de las 40 a los 51 años de cárcel, pero el delito de hurto agravado aumentaría la condena en 60 años.