Inician conversaciones de paz con el Estado Mayor Central

El gobierno colombiano a cargo del presidente Gustavo Petro y el mayor grupo disidente de las FARC iniciaron este domingo conversaciones de paz y un alto el fuego bilateral de 10 meses en un intento de poner fin al papel del grupo en casi seis décadas de conflicto interno, según anunció el mismo grupo al margen de la ley.

Las negociaciones con el Estado Mayor Central (EMC), un grupo disidente de las ahora desmovilizadas guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), forman parte de los esfuerzos del presidente Gustavo Petro para alcanzar la "paz total".

El EMC rechazó un acuerdo de paz en el año 2016 con el gobierno de Juan Manuel Santos, que puso fin al papel de las FARC en el conflicto, una disputa bélica que cobró la vida de al menos a 450.000 personas y ha desplazado a millones.

En cuanto a las acciones de guerra, Andrey Avendaño, el delegado del Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc, dijo este domingo que "Las operaciones ofensivas están suspendidas", en medio de un evento que tuvo lugar para anunciar las negociaciones.

El trato comenzó en Tibú, en la provincia de Norte de Santander, escenario de frecuentes enfrentamientos entre el ejército colombiano y pelotones de grupos armados ilegales, además un lugar caracterizado por contener vastas extensiones de tierra cubiertas de cultivos de coca.

"Desde el inicio de la conversación hemos propuesto un cese al fuego bilateral, temporal y nacional para llevar ayuda humanitaria a las comunidades que son víctimas directas del enfrentamiento armado donde se desarrolla el conflicto", dijo Avendaño.

Según fuentes de seguridad del país, el EMC cuenta actualmente con unos 3.530 miembros, de los cuales 2.180 combatientes y otros 1.350 distribuidos en regiones de toda Colombia donde se producen actividades ilícitas como el narcotráfico y la minería ilegal de oro.

En mayo, el gobierno colombiano suspendió parcialmente el alto el fuego bilateral que había acordado con esta disidencia en enero tras el asesinato de cuatro menores indígenas y ordenó la reactivación de las operaciones militares contra el grupo en el sureste del país.

¿Cómo van las negociaciones con otras guerrillas?

Simultáneamente, al acuerdo con el EMC, el gobierno también está impulsando los esfuerzos de paz con la Segunda Marquetalia, otro grupo disidente de las FARC con más de 1.600 miembros. Los expertos han advertido que las negociaciones con la Segunda Marquetalia se enfrentarían a problemas legales porque los líderes del grupo aceptaron y luego abandonaron el acuerdo de 2016.

En cuanto a las negociaciones con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el gobierno mantiene un cese bilateral de seis meses que tuvo inicio el pasado agosto con el fin de mantener buenas relaciones en el proceso de paz que adelantan.