Por: Luisa Soriano • Colombia.com

La Corte Suprema de Justicia condenó a 13 años y 9 meses de prisión a Moreno

El exsenador Iván Moreno Rojas recibió su segunda condena por este grave escándalo de corrupción que lideró junto a su hermano, el entonces alcalde Samuel Moreno, quien murió hace unos meses.

Iván Moreno fue capturado el 28 de abril de 2011 y desde entonces permanece recluido en La Picota. Foto: Twitter
Iván Moreno fue capturado el 28 de abril de 2011 y desde entonces permanece recluido en La Picota. Foto: Twitter

El exsenador Iván Moreno Rojas recibió su segunda condena por este grave escándalo de corrupción que lideró junto a su hermano, el entonces alcalde Samuel Moreno, quien murió hace unos meses.

La Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia condenó al exsenador Iván Moreno Rojas a 13 años, 9 meses y 5 días de prisión, como autor de los delitos de concierto para delinquir agravado, enriquecimiento ilícito de particular y como determinador de cohecho propio e interés indebido en la celebración de contratos.

La Corte Suprema también lo inhabilitó para el ejercicio de derechos y funciones públicas por 166 meses y lo condenó al pago de una multa de $ 5.003 millones y a otra de 4.211 salarios mínimos legales mensuales vigentes. Además, La Sala de Primera Instancia le negó la suspensión condicional de la ejecución de la pena, así como el beneficio de prisión domiciliaria. Sumado a esto, deberá pagar daños y perjuicios por $ 20.046 millones.

Los hechos por los cuales fue condenado tienen que ver con el acuerdo ilegal al que llegó con su hermano Samuel Moreno Rojas y algunos contratistas del Distrito Capital, entre ellos Manuel Sánchez Castro, Emilio Tapia Aldana, Héctor Julio Gómez y Álvaro Dávila, congresistas, concejales y otros particulares.

La sentencia señala que este grupo se concertó para recibir apoyo político y/o económico para la campaña que llevó a Samuel Moreno Rojas a la alcaldía de Bogotá, para el periodo 2008-2012, e incrementó de manera injustificada el patrimonio de sus integrantes. Todo esto a través de la manipulación de contratos del Distrito y el pago de comisiones o dádivas por parte de los contratistas.

En la sentencia, la Sala de Primera Instancia resolvió de forma negativa la solicitud de prescripción de la acción penal invocada por el acusado, así como las presuntas irregularidades alegadas por la defensa y consideró que la prueba recaudada lleva a la certeza sobre la responsabilidad del procesado en los delitos por los cuales fue acusado.

“En definitiva, las pruebas acopiadas y valoradas en conjunto llevan a esta Sala Especial a establecer que el aforado, con conocimiento y voluntad, hizo parte de la organización que por varios años se dedicó a vincular a personas de confianza en cargos directivos de entidades del Distrito con el objetivo de manipular la contratación pública a cambio del pago de comisiones por parte de los contratistas y acrecentar sus patrimonios económicos ilícitamente. Aunado a ello, se tiene que al enjuiciado no le fue suficiente adherirse a la empresa criminal, sino que la lideró de acuerdo con los propósitos de aquella”, señala la Corte Suprema de Justicia.