Sin las termoeléctricas que no gustan a Gustavo Petro habría racionamiento energético

Colombia atraviesa por una crisis climática debido al Fenómeno del Niño que ha provocado sequías con su consecuente problema de desabastecimiento de agua en varias regiones del país, pero la escasez del líquido vital en los embalses no solo pone en riesgo el suministro a los hogares, también tiene pensando a las autoridades energéticas sobre un racionamiento de energía, lo cual impactaría negativamente en los sectores productivos de la economía.

Un gran porcentaje de la energía en el país se genera por medio del agua de los embalses, pero como estos se encuentran en varias regiones del país en niveles críticos, se ha tenido que recurrir a las generadoras térmicas o termoeléctricas.

El presidente Gustavo Petro no ha visto ni ve con buenos ojos la generación de energía por medio de combustibles fósiles con los que trabajan las termoeléctricas, en donde la gasolina, el gas natural y el carbón son los elementos que las ponen en funcionamiento.

No existe un racionamiento de energía hasta el momento gracias a que las plantas generadoras de energía en diferentes lugares del país se encuentran en funcionamiento a su capacidad máxima, y aunque al mandatario nacional no les guste, estas han salvado al país, por el momento, de un racionamiento, cuyo riesgo todavía existe si no llegan las lluvias.

Remplazar las termoeléctricas y consumir menos gas natural son algunas de las acciones que el presidente Petro quiere implementar en su gobierno y dejar abierto el camino para que otros lo hagan, pero ante esta crisis no existe más opción en vista de que no existen otras fuentes de energía disponibles.

Las energías limpias a partir de hidrógeno y viento siguen siendo un sueño, pues en el caso de la energía eólica, un parque en La Guajira no representa un completo sistema de generación de energía de carácter nacional.

Las termoeléctricas en Colombia generan menos de un 20% de la energía que necesita el país, pero con esta emergencia han subido al 48% permitiendo que los racionamientos de energía no hayan tenido que ser decretados.

Es importante que inicie pronto la temporada de lluvias en el país, pues de esto depende que no haya necesidad de un racionamiento energético, un asunto que todavía no descartan las autoridades.