Por: Juan Carlos García Sierra • Colombia.com

Murió temido disidente de las Farc en operativo militar en el departamento de Antioquia

Alias “Cabuyo”, cuyo nombre era Ricardo Abel Ayala Orrego, murió en un enfrentamiento con miembros del Ejército Nacional y elementos del CTI de la Fiscalía en zona rural del municipio de Barbosa en Antioquia.

Actualización
En una operación en Barbosa en Antioquia fue abatido alias "Cabuyo" jefe de la disidencia 36 de las Farc. Foto: Twitter @COL_EJERCITO
En una operación en Barbosa en Antioquia fue abatido alias "Cabuyo" jefe de la disidencia 36 de las Farc. Foto: Twitter @COL_EJERCITO

Alias “Cabuyo”, cuyo nombre era Ricardo Abel Ayala Orrego, murió en un enfrentamiento con miembros del Ejército Nacional y elementos del CTI de la Fiscalía en zona rural del municipio de Barbosa en Antioquia.

Los operativos en contra de las disidencias de las Farc siguen dando resultados positivos para las Fuerza Pública, uno de ellos y realizado en las últimas horas permitió a tropas del Ejército Nacional dar de baja o “neutralizar”, de acuerdo con la retórica oficial castrense, a alias “cabuyo”, cabecilla de la disidencia 36 de las Farc.

En un operativo realizado por la Séptima División del Ejército Nacional y el Cuerpo Técnico Investigativo de la Fiscalía General de la Nación (CTI), murió Ricardo Abel Ayala Orrego, más conocido con el alias de “Cabuyo”, en zona rural del municipio de Barbosa, ubicado en el extremo norte del Valle de Aburrá.

En la vereda conocida como La Herradura se produjo un enfrentamiento entre tropas de la Cuarta Brigada y Ayala Orrego, quien se encontraba con uno de sus escoltas, quien fue detenido por las autoridades y cuya identidad corresponde a Jairo Alberto Galeano, a quien se le incautaron dos pistolas y un fusil.

Alias “Cabuyo, a pesar de su corta edad, apenas 29 años, era uno de los hombres más buscados por las autoridades en el departamento de Antioquia. Ricardo Abel Ayala Orrego inició su actividad delincuencial a corta edad y había logrado salir con vida a más de 10 operativos militares, con bombardeo incluido, y a las heridas producidas por un tirador de alta precisión del Ejército Nacional.

A Cabuyo muchos lo han creído muerto, pero cuando lo vieron vivo no lo pudieron creer, pues parecía que era inmortal, aunque las graves heridas que le produjo un francotirador por poco acaban con su vida, por lo que convirtió el cañón de San Pablo en una compleja guarida en la que los portones y los escondites formaban parte de su rutina.

Cabuyo era conocido por ser un peligroso y violento elemento de las disidencias y por esa razón fue herido mortalmente cuando en medio de una celebración, con licor de por medio, tres balazos impactaron en su humanidad; uno en el pecho, otro en el abdomen y uno último en un muslo.

Ayala Orrego no logró esquivar las balas, pero sí a la muerte, y se refugió en el cañón de San Pablo, un lugar que era prácticamente de su entero dominio, pero para la fuerza pública ningún territorio es vedado para la soberanía que resguardan las instituciones, por eso llegaron hasta el lugar en el que se escondía mientras se reponía de las graves heridas recibidas hace más de un año.

Siendo muy joven fue seleccionado durante el proceso de paz para liderar una organización de desminado, pero pronto desertó y prefirió la vida delictiva en las disidencias dedicándose al tráfico de drogas, de armas, extorsión y minería ilegal.

A “Cabuyo” y la gente que dirigía se le atribuyen los crímenes de 3 geólogos de la minera Continental Gold, así como el fusilamiento de 4 jóvenes en el municipio de Anorí, y el asesinato del líder social Didier Agudelo, también en el departamento de Antioquia.

Iván Duque Márquez, presidente de la República manifestó su satisfacción por la operación militar en Antioquia en la que se “neutralizó” a Ayala Orrego afirmando que los narcoterroristas no tienen escondite seguro.