Niño ambientalista colombiano es nombrado nuevo embajador de buena voluntad ante la Unión Europea

Hace poco, Francisco Vera se hizo conocido por las amenazas de muerte que recibió a través de las redes sociales de un hombre, por el que incluso, el mismo presidente de la República solicitó a las autoridades dar con su paradero y responder por sus actos.

El hecho fue repudiado por toda la sociedad, que además expresó su apoyo a un pequeño, que con tan solo 11 años, se ha sabido ganar el aprecio y el respeto por su amor y sus acciones en favor de la ecología, algo que no realizamos los mayores de edad.

Francisco Vera Manzanares fue nombrado Embajador de la Buena Voluntad de la Unión Europea, una distinción que pocos obtienen y que él se ganó a puro pulso, gracias a su amor por el medio ambiente y por sus acciones decididas para conservarlo y promover entre grandes y chicos el amor por la tierra.

“Hemos seguido de cerca sus iniciativas que dan esperanza en un momento como este, donde podemos repensar y reconstruir un crecimiento sostenible, centrado en el uso de tecnologías verdes y en el respeto por la naturaleza con el compromiso de no dejar a nadie atrás”, manifestó Patricia Llombart, embajadora de la Unión Europea en Colombia.

Este nombramiento para el pequeño, es un reconocimiento a su gestión, pero además busca garantizar su seguridad y permitir que continúe con su invaluable labor, que es un ejemplo para un país y fomenta en los más pequeños, todos los valores y el amor que se debe tener por el campo, la naturaleza y las acciones en favor de estos.

Con tan solo 9 años, Francisco Vera fundó junto con 6 amigos el grupo ecologista Guardianes por la Vida y por medio de las redes sociales se ha hecho muy popular, pero lo más importantes son sus mensajes y acciones, la Unión Europea considera muy importante que gracias s u reconocimiento e imagen en las redes sociales continúe promoviendo la igualdad de género y los derechos humanos y ambientales.

Su mensaje ha trascendido las fronteras colombianas y ha logrado sumar a su causa a cientos de niños en Argentina, Chile, México y Venezuela en donde genera conciencia sobre el cuidado y la protección de los ecosistemas y del cambio climático, y también para mejorar la pedagogía ambiental en las instituciones educativas.