Por: Christopher Ramírez • Colombia.com

Nueva estafa utiliza falsos comprobantes de pago en domicilios para obtener comida gratis

Una de las víctimas perdió casi un millón de pesos por medio de esta nueva estrategia de estafa.

Los pedidos que hacen los estafadores no son para nada económicos. Foto: Pixabay
Los pedidos que hacen los estafadores no son para nada económicos. Foto: Pixabay

Una de las víctimas perdió casi un millón de pesos por medio de esta nueva estrategia de estafa.

Durante la pandemia, las nuevas tecnologías se convirtieron en el bastión que mantuvo a flote la economía, no solo en Colombia sino en todo el planeta. Las aplicaciones de compras y ventas tomaron su lugar en la historia y el e-commerce se ha mantenido como la principal forma de comercio en todo el mundo.

Sin embargo, como el ying y el yang, toda parte buena también tiene su cara mala y en este caso son las estafas que se pueden realizar por medio de las compras que se pueden realizar gracias al internet.

Un ejemplo de esto es la nueva estrategia de robo que han denunciado varios comerciantes durante la pandemia, que consiste en un engaño en el pago electrónico para así poder estafar a los comerciantes y comer gratis. Así lo relató una de las víctimas en entrevista con el periódico El Tiempo, que aseguró aprovechan la demora en las transacciones bancarias, y la necesidad generada durante la crisis, para poder robarse la comida.

“(El 24 de enero) nos enviaron un comprobante de una transferencia desde un banco a otro y como era domingo pues no entró de una vez. Yo llamé al banco pero me dijeron que no había forma de corroborar eso”, dijo la mujer al diario colombiano, asegurando que el pago del pedido con el que ‘cayeron’ en el restaurante superaba los 490 mil pesos.

Ante las circunstancias, la mujer accedió a enviar el pedido al edificio y piso referenciados en el domicilio, esperando que el lunes se viera reflejado el pago en su cuenta bancaria.

Ahora bien, los estafadores no quedaron contentos con su fechoría, por lo que decidieron probar suerte nuevamente al día siguiente y en el mismo restaurante.

“Yo estaba despachando pedidos y vi que habían hecho otro por 446.000 a esa misma dirección. Yo advertí que esa persona ya había pedido pero le hicimos ‘a la de Dios’ porque no habíamos vendido casi nada ese día”, explicó la víctima.

Como era de esperarse, el dinero nunca llegó. Cuatro días después la mujer, al ver que la transferencia no se hacía, decidió escribir al chat de WhatsApp que solicitó el domicilio quejándose por la ausencia del pago.

“Me dijo que le parecía muy raro porque a ella le habían descontado el dinero y que iba a poner una queja al banco”, agregó la mujer, citando un audio de voz de la presunta estafadora, y mostrando un correo que supuestamente demostraría que el banco en cuestión ya se encontraba en las búsqueda del error que condujo a la pérdida del dinero.

Desde entonces, no se tuvo más noticias de esta persona.

“Como el 30 de enero le escribí y ya no le llegaba nada a su Whatsapp pero no me bloquearon porque la agregué desde otro número y no aparecía. Eliminaron ese número y tiraron la sim card, era falso”, concluyó.

En consecuencia, y ante lo que ya consideran en el restaurante como una clara estafa, la mujer y uno de sus compañeros de trabajo tuvieron que pagar la mitad del pedido.