Obispo de Neiva llama a ambientalistas “Caterva de ignorantes”

Una polémica se suscitó en los últimos días debido a una columna que escribió el Obispo de la ciudad de Neiva, capital del departamento de Huila, Froilán Casas, en el Diario La Nación en donde se pronunció sobre la lucha que adelantan los ambientalistas en la capital huilense.

En su columna, el Obispo Casas criticó duramente la gestión que vienen adelantando los ambientalistas regionales, en un fragmento del escrito el prelado manifestó “Ahora los llamados defensores de los animales, y por qué no decir, de la naturaleza, han descubierto que el agua moja y entonces se rodean de una caterva de ignorantes que hacen mucho ruido y salen a la palestra convenciendo a los ingenuos e ignorantes, que se vuelven portavoces, oyendo cantar al gallo, pero sin saber dónde”.

Las reacciones por parte de quienes se sintieron atacados no se hicieron esperar, pues afirmaron que el obispo ´con una mano bendice y con la otra destila veneno´, además lo han criticado por considerarlo como un elemento de la curia propio de la élite que cercano a las clases populares.

El rechazo a la columna del religioso se realizó en medio de una vigilia en la puerta de la catedral de Neiva, en donde apostados, los jóvenes defensores de la naturaleza realizaron una vigilia por los humedales para exigir reconocimiento para estos cuerpos de agua y que sean también reconocidos sus derechos y se establezcan medidas de protección para ellos.

Humberto Perdomo, un portavoz de la organización Globo Verde también rechazó las palabras del obispo considerando su actuación como mezquina y ruin, además este mismo grupo protesta porque las autoridades de la ciudad consideran que solo existen 3 humedales cuando realmente son 33, y exigen protección para todos.

Con pancartas los manifestantes expresaron su rechazo, incluso una de ellas dice que el ignorante verdadero es el religioso, quien en otras oportunidades se ha referido duramente a diversos temas polémicos, en una ocasión dijo que un cristiano no podía ser comunista y que fusilaría a los corruptos.

El obispo generalmente hace uso de un tono fuerte y autoritario, y en esta ocasión los ambientalistas consideran que estuvo desatinado y especialmente ofensivo con un grupo que solo busca la protección de la naturaleza al solicitar a las autoridades protección para la vida silvestre y los humedales de la ciudad.