Presunto motín en estación de Policía de Funza pone a pensar si el fantasma del hacinamiento ha retornado

Cinco personas fallecidas en un incendio ocasionado por un presunto motín de detenidos en la estación de Policía del municipio de Funza en el departamento de Cundinamarca generan nuevamente inquietud por las condiciones de seguridad de los establecimientos policiales en el país, los cuales deben ser en muchos casos utilizados como improvisados centros de reclusión.

Falta de establecimientos carcelarios

La escasez de lugares propicios para detención de personas infractoras de la ley hace que las estaciones de Policía deban albergar a estas personas, pero el problema que se cierne es sus instalaciones son las adecuadas en materia de seguridad y si el pie de fuerza puede garantizar un permanente control y vigilancia sobre cada uno de los detenidos.

El incendio que fue ocasionado, presuntamente por un motín, dejó como saldo fatal el de 5 detenidos y 7 heridos, y pone en discusión nuevamente el asunto de la falta de instalaciones carcelarias, un tema del que mucho se ha hablado, pero que no tiene todavía soluciones concretas.

Un asunto que también ha promovido la agitación entre las autoridades y la opinión pública tiene que ver con que el incendio provocado no pudo ser rápidamente sofocado por los elementos policiales, pues este se propagó con tiempo suficiente para que algunos transeúntes capturaran imágenes a través de sus dispositivos celulares.

No es la primera vez

Los fallecidos en las estaciones de Policía colombianas se cuentan por decenas y tienen en el hacinamiento a uno de sus principales elementos de ignición, muchas veces ante la impotente acción de elementos policiales que deben realizar todo tipo de funciones, a los que deben agregar la custodia de detenidos.

Aunque las investigaciones sobre el presunto motín en Funza se encuentran en etapa preliminar y arrojar conclusiones apresuradas podría ser una acción desatinada, un posible hacinamiento, ninguna novedad en la dinámica carcelaria en el país, podría ser un elemento decisivo en esta tragedia que le agrega más cifras a la inseguridad dentro de instalaciones de la Fuerza Pública.

El gobernador del departamento de Cundinamarca Jorge Emilio Rey, expresó en una publicación en su cuenta de X que la quema de colchones por parte de detenidos amotinados se erige como uno de los principales orígenes de la conflagración que fue extinguida por el Cuerpo de Bomberos de la población de Funza, distante a pocos kilómetros de la ciudad de Bogotá.

Con el correr de las horas se conocerán más detalles del suceso y razones más estudiadas sobre un hecho que enluta a varias familias y hace crecer la sensación de que las estaciones de Policía en Colombia son instalaciones con graves fallas en su seguridad y empleadas en muchas ocasiones para fines diversos a su fin original.