Por: Juliana Palomino • Colombia.com

Proyecto de ley que pretendía evitar la renuncia de ministros antes de la moción de censura no prosperó

Aparentemente la iniciativa no prosperó en la Comisión Primera de la Cámara.

Congreso de Colombia. Foto: Shutterstock
Congreso de Colombia. Foto: Shutterstock

Aparentemente la iniciativa no prosperó en la Comisión Primera de la Cámara.

Desde el Ministerio Público se buscaba determinar la responsabilidad de Abudinen por las irregularidades denunciadas en la etapa precontractual de la licitación pública denominada "Centros digitales", así como en la firma y ejecución del contrato suscrito con la Unión Temporal Centros Poblados de Colombia, para la conexión de más de 7.000 escuelas rurales a internet.

"La decisión, proferida por la Sala Disciplinaria de Instrucción del Ministerio Público, ordena la práctica de pruebas como realizar la inspección al expediente que adelanta la entidad relacionada con el contrato estatal", informó la Procuraduría en un escueto comunicado.

Para empezar a ejecutar dicho contrato, cuyo monto total supera el billón de pesos, el Gobierno dio a Centros Poblados un anticipo de 70.000 millones de pesos.

Sin embargo, medios como la emisora W Radio revelaron que el contratista, que no tenía experiencia ni capacidad para cumplir con lo acordado, presentó tres pólizas de garantías falsas en la licitación y tras recibir el anticipo apenas se ha avanzado en la ejecución del contrato.

Abudinen sería la quinta ministra que renuncia a su cargo antes de una moción de censura desde que se creó en la Constitución de 1991 y la segunda funcionaria líder de un Ministerio que se haría a un lado durante el Gobierno de Iván Duque.

Aparentemente la molestia del Congreso no se hizo esperar, pues la moción de censura implicaría que los que no cuentan con las mayorías en el poder Legislativo pierdan automáticamente su puesto, por lo que preferirían renunciar con anterioridad.

Ante esto, el representante César Lorduy radico para mediados de este año un proyecto de lay con el que se pretendía evitar que los funcionarios puedan renunciar antes de un debate de moción de censura, por lo que su renuncia sería aceptada una vez se haya realizado la votación en el Congreso, pero el proyecto no prosperó.

“Con esta iniciativa se supedita la aceptación de la renuncia por parte del nominador, hasta tanto la moción sea votada por los integrantes de la Cámara que la haya propuesto. Así las cosas, si la moción es aprobada, el funcionario quedará separado de su cargo con ocasión de esta, mas no por haber renunciado, y de ser rechazada la moción de censura, entonces procederá el nominador a decidir sobre la renuncia”, data el archivo del proyecto.