Fiscalía deja en libertad dos taxistas vinculados en muerte de agente

La Fiscalía no pudo demostrar su responsabilidad en los hechos que terminaron con la vida del agente James Terry Watson. 

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La Fiscalía no pudo demostrar su responsabilidad en los hechos que terminaron con la vida del agente James Terry Watson. 

Ángel Mauricio Pulgarín Orjuela y Wilson Daniel Peralta Bocachica, seguirán vinculados a la investigación. 

Gildardo Acosta, abogado defensor de Wilson Daniel Peralta Bocachica, conductor de taxi y vinculado con la muerte de agente de la DEA en Bogotá, confirmó que su defendido junto con Ángel Mauricio Pulgarín, seguirán vinculados a la investigación, pese a que se les otorgó la libertad.

Destacó sin embargo que “afortunadamente el Juez de Control de Garantías le concedió la libertad (a su defendido), teniendo en cuenta que la Fiscalía General de la Nación no sustentó debida forma la imputación de cargos”.

Según confirmó la defensa de Peralta Bocachica, junto con la del otro taxista solicitaron al Juez de Garantías que se aclarara la imputación que se estaba haciendo a estas 2 personas, porque la Fiscalía no pudo demostrar que estuvieran implicados en los delitos que se señalaban.

Alerta por utilización de taxis legales en atracos en Bogotá

Así queda evidenciado tras el asesinato en el norte de Bogotá del agente de la DEA James Watson, víctima de un paseo millonario. Al crimen está vinculado el taxista Edgar Javier Bello Murillo, quien con engaños obtuvo un segundo vehículo para el asalto, dirigió a sus cómplices y atacó en compañía de Héctor López, al agente americano.

La historia del asalto se inicia en la tarde del jueves pasado cuando el taxista Edgar Bello, alias “Payaso”, le pide prestado al taxista, Ángel Mauricio Pulgarin, su vehículo con el argumento de que el taxi que maneja desde hace dos meses está varado.

El taxista accede a entregar el taxi y Bello se dirige al norte de Bogotá en donde, se presume, se encuentra con los otros tres cómplices y el taxi identificado con la placa VEN 144, propiedad de José Ramos.

El control de los dos taxis los asumen Edwin Gerar Figueroa y Omar Fabián Valdez Gualteros, mientras que alias “Payaso” y Héctor Leonardo López, alias “Bavario”, ocupan uno de los dos automotores.

Tras el asesinato del agente Watson, alias “Payaso” entrega el vehículo a Wilson Daniel Peralta, el conductor que labora en el turno del día, y le advierte que los rastros de sangre en el interior son producto de una riña.

Tras entregar el vehículo, toma el control del segundo taxi y lo devuelve a Ángel Mauricio Pulgarin. La sospecha, sin embargo, surge cuando Bello no aparece al día siguiente a recibir el turno de la noche.

Es entonces cuando el conductor Wilson Peralta y Pulgarin advierten al dueño del vehículo sobre la extraña desaparición de “Payaso”.

Los propietarios optan por presentarse con los conductores Peralta y Pulgarin a la Dijin, donde empiezan a aparecer las primeras pistas del crimen.

Con medios.

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