Aída Merlano cierra capítulo: asumirá pena por la fuga que sacudió al país

El primero de octubre de 2019, las cámaras de seguridad registraron el momento exacto en el que la excongresista Aida Merlano se fugó de un consultorio odontológico en una escena casi de película, todo esto mientras estaba privada de la libertad por motivos políticos. Aída después apareció en Venezuela.

Ese episodio no solo la involucró a ella sino también a su Aída Victoria Merlano y la justicia intenta probar y dar una condena por haber ayudado a la fuga de su madre en ese momento.

El preacuerdo que cambia el ritmo del proceso

Después de años de idas y venidas, este jueves se conoció que Merlano aceptó un preacuerdo con la Fiscalía. La negociación fija una pena de tres años y medio de prisión, exclusivamente por la fuga. Es una decisión que le pone freno a ese capítulo específico de su expediente y le permite a la justicia cerrar un proceso que llevaba tiempo en suspenso.

Con el preacuerdo, Merlano tiene que pagar 42 meses de prisión y se le pone fin a un juicio largo al que no se le veía desenlace. Sin embargo, su aceptación sí marca un cambio en el panorama que la rodea, ya no habrá más audiencias ni disputas legales relacionadas con aquel escape que la mantuvo prófuga.

Para Merlano, la pena acordada también define su futuro inmediato. La forma en que cumpla la condena, y si puede acceder a beneficios dependiendo del tiempo y conducta, será una discusión posterior.

Un caso que sigue despertando preguntas

El nombre de Aída Merlano ha estado asociado por años a controversias, investigaciones y momentos que quedaron grabados en la conversación pública. Su fuga fue, quizás, el capítulo más mediático de todos, y este preacuerdo vuelve a poner su historia en la agenda nacional.

Por ahora su hija, Aída Victoria Merlano tendrá que presentarse en audiencia el 11 de diciembre para determinar su futuro y si la justicia la va a condenar por haber ayudado a la fuga.

Cabe recordar que Merlano quedó prófuga de la justicia de una manera premeditada pues, las cámaras de seguridad registraron el momento en el que se dio un abrazo con el odontólogo y presuntamente su hija ingresó al consultorio elementos que la ayudarían a través de su hermano menor de edad.