Gustavo Petro dice que no hay que ver la política como una construcción de enemigos

Gustavo Petro realizó la presentación del Pacto Histórico en el municipio de Jericó en el departamento de Antioquia, una tierra que en las últimas elecciones demostró su filiación uribista y en donde el líder de Colombia Humana ha tenido algunas diferencias, e incluso, en alguna oportunidad, fue rechazado y abucheado por algún sector de la comunidad.

Como los tiempos no son siempre iguales, muchos esperaban que el precandidato del Pacto Histórico no fuese recibido de buena manera, ante el conocimiento de su llegada a tierras antioqueñas muchos quisieron generar un mal clima, pero el aspirante presidencial venía animado por los resultados de su último encuentro hace unos días en Medellín, allí una multitud lo aclamó en un evento en un popular parque de la ciudad.

En Jericó existe una situación particular, por tal razón la principal figura de la oposición política decidió presentar el Pacto Histórico, pues en esta población en donde han nacido muchos religiosos católicos existe un deseo de gran parte de la población para que se suspendan las labores de minería, esto para defender las fuentes de agua y en general, para mantener el territorio libre de amenaza.

El aspirante presidencial inició su discurso diciendo que no hay que ver la política como la construcción de enemigos, justamente en momentos en donde la polarización política que vive el país hace que los odios se exacerben y que muchos políticos y también aspirantes presidenciales basen su discurso en contra del líder de izquierda en Colombia.

“Aquí llegamos a construir un futuro y un presente, un futuro y un presente que sí es de cambio, que representa el cambio de Colombia, por eso nos llamamos Pacto Histórico, Pacto porque queremos construir las reformas, las transformaciones a partir del consenso”, manifestó Petro ante la audiencia congregada en la plaza principal de Jericó.

El aspirante se refirió a una invitación que hizo a un político del pueblo para tomar tinto en un café y este le respondió que solo lo tomaba con amigos, esto hizo que Gustavo Petro lo tomara de ejemplo para ilustrar su deseo de no generar odios, sino de construir con base en el perdón.

“La única manera de sanar el corazón es que no veamos la política como una construcción de enemigos, a pesar de la diferencia siempre habrá puentes, siempre habrá objetivos comunes”, añadió el precandidato.

En Jericó existe un fuerte movimiento en pro del medioambiente y Gustavo Petro se involucró en la defensa de las fuentes hídricas del país.