Opositores de Nicolás Maduro en Colombia temen la llegada de Gustavo Petro al poder

Activistas, líderes de partidos, exoficiales y desertores militares de la oposición venezolana en Colombia están buscando salir del país después de la elección de Gustavo Petro como presidente ante el temor de correr riesgos en el país en medio del próximo gobierno. 

Estas personas, quienes convirtieron al territorio colombiano como su lugar de residencial, temen ser hostigados, espiados o incluso secuestrados pese a que Petro informó que los activistas y periodistas venezolanos en el país no enfrentarían acciones en su contra como la extradición. 

De hecho, el exlíder estudiantil y preso político, Pablo Parada, afirmó que se siente inseguro en el país en este momento. “Los vínculos de Maduro con el presidente entrante no son un secreto. Estamos seguros de que el Gobierno de Venezuela querrá la entrega de miembros de la resistencia y militares. Somos una amenaza”, señaló en una entrevista para Bloomberg. 

En ese sentido, Parada manifestó su intención de cruzar a pie el Tapón del Darién, la peligrosa selva que existe entre Colombia y Panamá, decisión a la que se suma el capitán del Ejército venezolano, Anyelo Heredia. 

Esto hombre, de 38 años, escapó de la prisión militar de Ramo Verde en Venezuela en 2019 y enfrenta cargos de traición. “La situación más delicada es para los jóvenes que no tienen recursos para salir de Colombia”, expresó Heredia a Bloomberg.

A su vez, ante ese medio de comunicación también habló el investigador del Observatorio Venezolano de la Universidad del Rosario en Bogotá, Ronal Rodríguez, quien afirmó que la oposición ha tenido acceso directo a los altos niveles del gobierno colombiano para dar forma a la política hacia Venezuela pero que, con Gustavo Petro, la situación va a cambiar porque deben tomar medidas para proteger a los venezolanos perseguidos.

Cabe mencionar que en Colombia se encuentran, de manera regular e irregular, miles de venezolanos que han salido del país en busca de oportunidades o por ser perseguidos por el régimen de Nicolás Maduro. Este es el caso de Julio Borges, expresidente de la Asamblea Nacional (AN). 

Borges fundó el partido Primero la Justicia (PJ) y ha estado en Bogotá durante más de cuatro años después de que el gobierno venezolano emitiera una orden de arresto en su contra por ser el presunto autor intelectual de un ataque con drones explosivos contra Maduro.

En Bogotá, el opositor venezolano lleva una vida tranquila en contraposición a lo que enfrentó en Caracas, donde funcionarios de Maduro lo ridiculizaron y tenía que ser escoltado por guardaespaldas por miedo a ser asesinado. Por tal razón, teme que, con la llegada de Petro al poder, enfrente nuevas amenazas.