“Señor Petro, los colombianos no necesitamos que usted nos diga que es dañino”: Polo Polo

La reforma tributaria radicada por el nuevo gobierno del presidente Gustavo Petro ha generado todo tipo de reacciones dentro de las diferentes figuras políticas, desde quienes lo apoyan, hasta quienes los rechazan tajantemente. 

Uno de los puntos que más ha generado polémica es el impuesto a algunos alimentos y a las bebidas azucaradas. Si bien el presidente y su gabinete han sido enfáticos en que el consumo de estos productos producen serios problemas de salud pública, se le ha refutado que esto podría afectar la canasta familiar.

Durante la primera Cumbre de Alcaldesas y Alcaldes del Litoral Pacífico nuevamente defendió la reforma y se refirió al tema de las gaseosas, afirmando que el impuesto no era precisamente para reunir dinero, sino para evitar su consumo. Así lo expresó:

“El impuesto a las gaseosas no es para recaudar plata, es para que la gente no tome tanta gaseosa. Lo que hacemos es ahorrarnos una plata, no es recibir plata”, apuntó el presidente Gustavo Petro.

Así las cosas, figuras de la oposición no han parado de cuestionarle y señalar que esto afectaría a las familias de menos recursos, que como lo manifiestan, son los productos que pueden comprar para poder alimentarse, ese es el caso del Representante a la Cámara Miguel Polo Polo quien escribió lo siguiente: 

“Para Petro el pueblo fue inteligente al elegirlo de Presidente, pero bruto a la hora de ver que comerá. Aparte del 19% de IVA, le clava un impuesto del 10% adicional a las gaseosas, chocorramo, golosinas, papitas y más productos, porque son "dañinos". Pero apoya las drogas.”, manifestó.

Continuó diciendo que los “progres” creían que podían decirles que comer, como vestir, que decir y “manejarnos la vida a su antojo”. Añadió que con los impuestos a las gaseosas, la gente ya era suficientemente racional para saber que consumir y que no podía ser el presidente quien señalara que era dañino por lo que decidió trinar lo siguiente:

“Señor Petro, los colombianos no necesitamos que usted nos diga que es dañino o no a la hora  de comer. Esa NO es su función ni la del Estado. Usted llegó fue para generar las condiciones de empleo y seguridad, no para ser nuestro nutricionista. No se mete en nuestras vidas y bolsillo”, escribió el congresista en su cuenta de Twitter. 

Finalmente, el congresista se mantiene en su idea de que la reforma tributaria en el tema de los alimentos afectará a la clase más baja, respaldando su idea de que afectara la canasta familiar de los colombianos, sin embargo, es preciso señalar que la lista de alimentos que serían gravados son altos en azúcares y grasas.