Su infancia estuvo marcada por los problemas, ya que debido a los conflictos que tenían sus padres, gran parte de esos años la pasó entre mudanzas y peleas.
No obstante, estas complicaciones no frustraron su deseo de actuar y aunque en un inicio comenzó como modelo, fue a partir de esto que consiguió sus primeros papeles en televisión a principios de los años ochenta que no llegaban a tener muchos diálogos, pero que le otorgaban la experiencia que necesitaba frente a las cámaras.
Uno de sus primeros trabajos fue en 1984 cuando trabajó en la cinta ‘Blame It on Rio’. Sin embargo, el gran éxito de su trayectoria llegaría con la película ‘Ghost’ de 1990, la cual la terminó de consolidar como una de las grandes estrellas de la época. El film lo protagonizó junto a Patrick Swayze y Whoopi Goldberg.
Fue a partir de esta película que la carrera de Moore tomó un pico muy elevado al protagonizar éxito tras éxito como en las cintas ‘A Few Good Men’ de 1992, ‘Indecent Proposal’ de 1993 y ‘G.O. Jane’ de 1997, donde la actriz demostró por qué es que en ese momento era una de las mejores pagadas y cómo es que todas las películas en las que aparecía se convertían en un completo éxito.
En lo que respecta a su vida personal, la actriz mantuvo un matrimonio con el actor Bruce Willis, con quien tuvo tres hijas y después con Ashton Kutcher. Además, la actriz siempre se ha mostrado bastante sincera con las diferentes complicaciones que ha tenido a nivel personal con las adicciones y la búsqueda de una estabilidad emocional.
En la actualidad, la actriz tuvo otro respiro en su carrera gracias a su protagónico en ‘La Sustancia’ de 2024 y que le ha permitido continuar vigente como una de las figuras más representativas del mundo del cine.