Los exesposos que se disputaron el Oscar a mejor dirección
James Cameron y Kathryn Bigelow fueron esposos, pero a ambos directores, la vida los puso a disputarse un Oscar a la mejor dirección.
James Cameron y Kathryn Bigelow fueron esposos, pero a ambos directores, la vida los puso a disputarse un Oscar a la mejor dirección.
Los premios Oscar en sus 96 años de existencia han generado todo tipo de situaciones y hechos anecdóticos que muchas veces se convierten en asuntos comentados durante años, mientras que otros aspectos pueden pasar desapercibidos.
El Oscar a la dirección es uno los galardones más importantes y muchos de sus ganadores han establecido relaciones de amistad, pero otros no han logrado mayor empatía y han marcado una rivalidad a lo largo de los años.
En el mundo de Hollywood, las relaciones sentimentales han sido protagonistas de historias de amor al estilo de las películas que se han realizado desde el inicio de este arte, así como también muchos idilios han terminado en escándalos y tragedias, algunas catalogadas por sus protagonistas como infiernos e historias de terror.
Actores y actrices, así como directores, han logrado establecer lazos de amor y matrimonios con amplias familias, pero lo que no ha sido usual es que existan matrimonios entre directores y directoras de cine, sin embargo, los ha habido, uno de ellos es el de James Cameron, reconocido por Terminator 2 y Titanic, película por la que recibió un Oscar a mejor dirección en 1998.
Cameron fue esposo de la directora Kathryn Bigelow, una unión que apenas duró 2 años, pero ambos fueron nominados a mejor director en la entrega de Oscar de 2010.
En aquella ceremonia, quienes fueron esposos se enfrentaban por llevarse la estatuilla, Cameron, director de la exitosa Avatar, aspiraba a su segunda, mientras que Bigelow, directora de Hurt Locker, soñaba con convertirse en la primera mujer en recibir el galardón por mejor dirección.
Cuando muchos creían que James Cameron sería el encargado de recibir la estatuilla, fue Bigelow quien se lo adjudicó, y de paso, hizo historia al ser la primera mujer en ganarlo gracias a una película en la que documentaba las actuaciones del Ejército estadounidense en el extranjero.
Aunque muchos creían que Cameron y Bigelow no tenían buena relación, ellos han sabido ser buenos amigos desde su separación, llegando ambos a trabajar en un mismo proyecto en diferentes ocasiones confirmando aquello de que en el cine, todo se puede.