Mauricio Soler perdió el liderato de la Vuelta Suiza y ahora es segundo

El colombiano terminó sexto en la tercera etapa y ahora se ubica segundo en la general a 54'' del nuevo líder, Damiano Cunego.

Mauricio Soler, segundo en la general de la Vuelta a Suiza. Foto: EFE
Mauricio Soler, segundo en la general de la Vuelta a Suiza. Foto: EFE

El colombiano terminó sexto en la tercera etapa y ahora se ubica segundo en la general a 54'' del nuevo líder, Damiano Cunego.

El italiano Damiano Cunego (Lampre) es el nuevo líder de la Vuelta a Suiza, arrebatándole al colombiano Mauricio Soler la camiseta amarilla, en la tercera etapa que ganó el joven eslovaco de 21 años Peter Sagan (Liquigas).

Soler terminó sexto y es segundo en la general a sólo 54 segundos del italiano Cunego que tuvo un excelente remate de carrera.

Cunego y Sagan se repartieron el botín en una jornada corta pero explosiva, con dos grandes puertos de montaña que hicieron trizas el pelotón. El italiano fue de menos a más, alcanzó al grupo de escapados en el ascenso del Grosse Scheidegg, de categoría especial y la cima a 11 kilómetros de meta y arriesgó en el descenso para enjugar la desventaja respecto al colombiano Soler, que cedió el maillot amarillo con un retraso en meta de 1.04 minutos.

En esa bajada fue donde Sagan, firme promesa del pelotón, hilvanó su sexta victoria de la temporada. Alcanzó a Cunego y se pegó a sus rueda. En la recta de llegada solo tuvo que arrancar y levantar los brazos. Los dos contentos, el eslovaco ganador de la etapa, el "principito" del ciclismo transalpino nuevo líder.

Ambos corredores marcaron en meta 3h.09.47 y bonificaron 10 y 6 segundos. A continuación cruzaron el danés Jakob Fuglsang (Leopard) y Laurens Ten Dam (Rabobank) a 21 segundos. El luxemburgués Frank Schleck terminó junto a Soler, lejos de la pelea por la victoria, a pesar del protagonismo de su hermano Andy en la escapada del día.

De esta manera Cunego vuelve al primer plano. A sus 29 años y después de ganar el Giro 2004 el ciclista de Verona no ha terminado de rematar una gran faena en una vuelta grande, al contrario que en las clásicas, donde guarda en su palmarés joyas como 3 Giros de Lombardía y la Amstel Gold Race. Podrá optar a una prueba del circuito mundial en Suiza si logra mantener 54 segundos de ventaja sobre Soler (Movistar), y 1.16 sobre el holandés Bauke Mollema (Rabobank), sus inmediatos perseguidores.

La etapa vio el resurgir de Andy Schelck, aplicado a la faceta de gregario de su hermano Frank. Alejado de su mejor forma a 20 días del Tour, participó en la escapada que marcó la jornada en el kilómetro 20, cuando despegaron 25 corredores, entre ellos además sus compañero de equipo Jakob Fuglsang y Jens Voigt, los españoles Alberto Losada. Jorge Azanza y José Joaquín Rojas, Peter Sagan y Jan Bakelands.

El recorrido tenía una primera dificultad de primera en el Grimselpass, donde la escapada grande se redujo a 5 corredores. Walter Poels, Laurens Ten Dam, Andy Schleck, Jakob Fuglsang y Peter Sagan. En la cima el pelotón tenía un retraso de 3:20.

Tras el descenso la carretera se volvió a levantar durante 18 kilómetros, a una media del 7,6 por ciento, para afrontar el Grosse Scheidegg, de categoría especial. Andy Schleck asumió el ritmo de subida mientras en el grupo del líder saltaba Cunego con ambición de enlazar antes de tirarse desde la cima a la meta.

Andy cedió a 2 kilómetros del alto, dando por terminado un trabajo interminable, pero su hermano no aparecía para tomar el relevo. Siguieron la marcha Fuglsang, Ten Dam, Sagan, Caruso y De Greef, pero todos fueron superados a escaso medio kilómetro de la pancarta de la montaña.

Cunego se tiró en la bajada, seguido por su compatriota Cristiano Salerno, eliminado por una caída. Pero el Liquigas tenía otra bala en la recámara. Sagan se unió al debate por la victoria.

Un pulso entre Cunego y Soler, separados en la general por 16 segundos. Entre medias Sagan, que aportó el impulso necesario para llevarse la etapa y presenciar en lugar privilegiado el cambio de líder.

Mañana se disputa la cuarta etapa entre Grindelwald y Huttwil, de 198,4 Kilómetros. EFE