Juegos Olímpicos

Un bronce olímpico que nació a la orilla del río Guatapurí

El Taekwondoca Óscar Muñoz creció en una barriada humilde conocida como 'Cola del Caballo', próxima a Valledupar.

Óscar Muñoz, medalla de bronce en taekwondo en los Juegos Olímpicos de Londres. Foto: EFE
Óscar Muñoz, medalla de bronce en taekwondo en los Juegos Olímpicos de Londres. Foto: EFE

El Taekwondoca Óscar Muñoz creció en una barriada humilde conocida como 'Cola del Caballo', próxima a Valledupar.

El colombiano Oscar Muñoz, que se colgó el bronce en una de las finales de la repesca al tailandés Pen-Ek Karaket, en la categoría de -58 kilos, ha admitido sentirse "dichoso" por haber conseguido esta medalla para Colombia.

"Fue un combate muy complicado, al final lo pude resolver", ha dicho Muñoz, quien sufrió un susto en los instantes finales del combate, cuando abrió su defensa y Karaket entró entre sus piernas para rozarle la cara, con un golpe que le hubiera dado tres puntos al asiático

Oscar Luis Muñoz Oviedo llegó a Londres como el único representante del taekwondo de Colombia y sin estar en las quinielas de los candidatos a obtener una medalla olímpica.

Por eso el bronce que se colgó el joven de diecinueve años en la división de los 58 kilogramos fue una verdadera sorpresa.

Oviedo, quien practica el taekwondo hace once años, llegó cuando tenía tres a la norteña ciudad de Valledupar por decisión de sus padres, que emigraron con toda la familia desde la población de El Difícil, también situada en el norte del país, en busca de un mejor futuro.

El hijo del jardinero Pompilio Muñoz alcanzó su clasificación a los Juegos Olímpicos de Londres luego de ocupar el primer lugar en los Panamericanos de la ciudad mexicana de Querétaro en noviembre del 2011.

En 2010 participó en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Singapur, donde ocupó el quinto lugar. 

La medalla de bronce alcanzada por Muñoz es la quinta de Colombia en estos juegos.

Conquistaron plata Caterine Ibargüen en triple salto, Oscar Figueroa en levantamiento de pesas y Rigoberto Urán en ciclismo. Y bronces la judoca Yuri Alvear.

Esta fue primera medalla olímpica en la historia del taekwondo colombiano.

Mientras el bronce de Muñoz fue una linda sorpresa para los colombianos, no sorprende en cambio que él forme parte de la gran mayoría de deportistas que han vivido situaciones difíciles de pobreza, y que han encontrado en el deporte un poco de salida a la misma.

Muñoz es otro ejemplo de superación personal ya que creció en una barriada humilde conocida como 'Cola del Caballo', próxima al río Guatapurí. Allí sus familiares y amigos celebraron la victoria de este joven de contextura delgada, 1,78 metros de estatura y 58 kilos de peso.

En la primera ronda se deshizo del argelino El Yamine Mokdad por 8-1 y en los cuartos de final venció a Mohamed Al Kubati por 14-2.

En la semifinal cayó ante el actual campeón mundial y número uno del ránking, el español Joel González por 13-4, y en la repesca superó a un excampeón mundial, el tailandés Pen-Ek Karaket.

El mejor taekwondista de Colombia espera graduarse este año de bachiller del colegio Francisco Molina Sánchez y seguramente continuará su preparación para la próxima cita olímpica en Río de Janeiro 2016.

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