Nataly Umaña se sinceró: Esto fue lo que pasó con Alejandro Estrada y su matrimonio

Nataly Umaña fue una de las figuras de las que más se habló a inicio de este año por su controvertida actitud al interior de La Casa de los Famosos, donde decidió serle infiel públicamente a su esposo, Alejandro Estrada con quien había estado durante más de 12 años, con el joven Miguel Melfi, para después recibir el escrutinio público durante varios meses.

La actriz contó hace un tiempo que tomó la decisión de serle infiel muy consciente en sus actos, pues según ella, la infidelidad fue la única manera que encontró para terminar su relación, pues, sabía que era algo que no se iba a perdonar, eso sí, solo pensó en lo que ella quería en dicho momento y no llegó a pensar en lo que Alejandro sentiría al ser humillado y expuesto en televisión nacional.

Ahora bien, en su reciente rol como presentadora y galardonada en Instafest, ella dio a conocer algunos detalles de su actuar dentro del reality asegurando que en su relación con Alejandro se sentía en un círculo vicioso y fue por esto que buscó entrar en el reality, para huir de esto.

“Esos patrones son tan comúnmente populares, donde decimos que atraemos lo que somos. ¿Qué hice? Me metí a un ‘reality’, le di besitos a un niño y yo estaba casada, con una relación de 12 años. Obviamente, me juzgó Colombia entera, y el 98 % de las personas eran de mi mismo género”, destacó la presentadora sobre el escenario.

Ella aseguró incluso que lejos a lo que se llegó a pensar que quería llamar la atención y volver a sonar en la televisión, ella tan solo reaccionó a una situación compleja que estaba viviendo afuera y que encontró una salida estando dentro de la casa a pesar de que no era la indicada ahora que lo ve desde afuera.

Y finalmente dijo que, “Después de todo esto, entré a terapia para conectar con mi interior, no como la gente piensa, para darme látigo por haber perdido un matrimonio, sino porque en realidad no sabía cómo salir de ahí. ¿Saben por qué? Porque éramos codependientes, y uno como ser humano lo normaliza. Yo pensaba: ‘Sí, claro, estuvo mal para la sociedad, pero estuvo bien para mí, porque era la única manera en que podía ser feliz y libre'”.