Karina García estalla en La Casa de los Famosos: “¡Esto ya no es un juego!”

En La Casa de los Famosos Colombia, el brunch de nominados que prometía ser un momento para abrir el corazón terminó convirtiéndose en una olla a presión que estalló en pleno Día de la Madre.

El detonante fue una grave acusación lanzada por Yina Calderón contra Karina García, quien no tardó en anunciar acciones legales por lo que considera una difamación directa a su vida personal.

Todo comenzó con un cruce de reproches durante la dinámica habitual del reality, donde los famosos expresan sus impresiones sobre sus compañeros. Calderón no solo cuestionó la lealtad de García como amiga, sino que fue más allá al señalarla como “escort”, una palabra que dejó helados a varios en la mesa y que, de inmediato, encendió las alarmas dentro y fuera de la casa.

Karina, visiblemente afectada, respondió con contundencia: “Te ganaste tu demanda”, afirmando que ya estaba en contacto con sus abogados. Lo que parecía una estrategia de juego cruzó la línea, y ahora podría escalar a un escenario jurídico que compromete al reality y a su producción.

Una herida del pasado que no sana

La tensión entre Yina y Karina no es nueva. Aunque en el pasado compartieron equipo en el grupo de las “Chicas Fuego”, su vínculo se ha ido deteriorando desde los primeros días del programa. En esta ocasión, la situación tomó otro matiz por la gravedad de lo dicho y el contexto emocional del Día de la Madre, fecha que Karina consideró sagrada, y en la que, según ella, se debía cuidar la sensibilidad de las palabras.

Calderón, por su parte, afirmó tener pruebas que respaldan su señalamiento y se desmarcó del escándalo con un matiz sutil: “No lo digo para que la saquen del programa”. Aun así, dejó claro que no respalda conductas que, según su percepción, dañan hogares.

Mientras tanto, Mateo Carvajal (‘Peluche’), como líder de la semana, intentó calmar los ánimos con un llamado al respeto: “Nadie está en el derecho de decir cómo es nuestra vida afuera”. Sin embargo, la tensión sigue latente, y la producción guarda silencio ante una posible expulsión por otros hechos que también habrían quebrado las reglas del formato.

La polémica ya está en la calle. Y aunque la convivencia sigue, las heridas abiertas entre Yina y Karina parecen ir más allá del juego.