Lionel Messi y la jugada de canchero que hizo luego del golpe de Santiago Arias

Lionel Messi, la gran estrella del fútbol mundial no para de romper récords y con el título de la Copa América, se metió entre sus grandes bolsillos un nuevo trofeo continental, ese mismo que se creyó no podría conquistar, y cuya maldición rompió en Brasil en 2021, luego de varias finales perdidas.

El crack argentino ya no es el mismo de antes, pues a sus 37 años ya se le ve con mucho peso en sus piernas y en esta Copa América de los Estados Unidos, sin ser el jugador desequilibrante de otras épocas, siguió mostrando destellos de calidad que llevaron a su selección a un nuevo trofeo para exhibir en su inmensa y nutrida vitrina.

Lionel Messi sigue siendo un jugador al que no se puede descuidar un segundo, y aunque para el partido con Colombia fue ´ablandado´ por los defensas cafeteros, el rosarino demostró que su experiencia va más allá de la línea final que determina el final del campo.

´La pulga´ no fue la figura del encuentro y fue relativamente bien controlado por la defensa colombiana, aunque con uno que otro golpe o cepillada que, finalmente, hizo que el capitán argentino se viera obligado a abandonar el partido, aunque intentó mantenerse, pero la inflamación en su tobillo se lo impidió.

En una jugada con el balón afuera del campo, Santiago Arias alcanzó a golpear el tobillo de Lionel Messi cuando este intentó centrar por la punta, pero el balón traspasó la línea de juego y, aunque, no fue considerada como falta por el juez, el astro gaucho quedó tendido.

El golpe recibido por Messi se presentó en un momento en el que Colombia mantenía un juego lleno de intensidad, entonces el diez gaucho, haciendo gala de la ´cancha´ que le han dado sus 37 años no se quedó en el mismo lugar en el que cayó, sino que se fue haciendo rollos hasta ingresar al terreno oficial y obligar al juez a permitir la atención al jugador.

Esta acción fue aplaudida y considerada como una verdadera ´canchereada´ de Lionel Messi, quien, finalmente, tuvo que abandonar la cancha con lágrimas en los ojos al no poder continuar en el campo para aportar a su selección en la conquista del título.