Colombia vs Venezuela: primera victoria ante los vecinos con el amarillo, azul y rojo

El inicio de las eliminatorias al Campeonato Mundial de fútbol de 2026 que se llevará a cabo en la sede tripartita de México, Canadá y los Estados Unidos, enfrenta a las selecciones de Colombia y Venezuela, un partido que n los últimos años ha generado una expectativa un ambiente particular.

La prensa se ha empeñado en afirmar que este encuentro es un clásico por la ubicación geográfica, pero hace 40 años era un partido entre cenicientas, por un lado, una selección Colombia que no podía organizar cuadros ganadores a pesar de sus buenos jugadores y un fútbol rentado con prestigio en el continente, y una selección de un país en donde el fútbol no gustaba porque el béisbol dominaba las pasiones de la población.

Una de las anécdotas que trae este partido entre cafeteros (así nos llaman y ahora así nos hacemos llamar) y una selección vinotinto que ha nutrido históricamente su fútbol con jugadores colombianos, tiene que ver justamente con la indumentaria de nuestro combinado.

Del zapote al tricolor

Colombia, que desde 1971 usaba el uniforme color zapote, una rara tonalidad que no era naranja y se parecía más a la exótica fruta tropical, pero para el último partido de la ronda eliminatoria a México 86 disputado en El Campín de Bogotá el 30 de junio de 1985, la selección Colombia dirigida por Gabriel Ochoa Uribe tuvo una camaleónica aparición.

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Los dirigidos por el exarquero antioqueño nacido en Sopetrán y que se graduó como médico, saltaron a la cancha del estadio de la calle 57 con pinta nueva, porque para enfrentar a Venezuela estrenaron el amarillo, azul y rojo fabricado por la marca alemana de las tres tiras, y aunque ya habían jugado con nuevo uniforme de marca nacional, solo contra Venezuela se lució una indumentaria que le quitó detalles a la original, como por ejemplo la camisa amarilla no era tan ´quemada´ y tenía cuello en V.

El combinado colombiano había sometido su uniforme a un rediseño porque el zapote, o salmón, si se quiere, no gustaba, y muchos lo consideraban feo y no hacía honor a la bandera colombiana, entonces recurrieron a María Elvira Pardo quien lo diseñó con amarillo, azul y rojo y una camiseta de cuello redondo, casi tortuga, que se dio a conocer en un partido amistoso contra Suiza que terminó empatado a dos goles.

Colombia estrenó su amarillo, azul y rojo en unas eliminatorias en el primer partido contra Perú en Bogotá y logró la victoria por un gol, pero el día del cierre de la eliminatoria en juego contra Venezuela en El Campín, no solo se estrenó indumentaria, sino que también hicieron su debut en la selección jugadores como Carlos Fernando Navarro Montoya, portero nacido en Colombia, hijo de argentino, pero criado en la patria del asado de tira y el bife de chorizo, Carlos Ricaurte, Jesús el ´Kiko´ Barrios y Eugenes Cuadrado.

Aquella tarde de domingo Colombia no fue tan colorida en su fútbol como su uniforme, pero le alcanzó para derrotar a Venezuela 2 goles a cero con anotaciones de Manuel Asisclo ‘triciclo’ Córdoba y Hernán Darío Herrera, pero pudieron ser 3 si el ´arriero´ no erra un penal.