Destapó la olla: Gustavo Florentín habló de la cruda realidad que vivió en el Bucaramanga

Gustavo Florentín fue uno de los grandes refuerzos que contrató el Bucaramanga para esta temporada, siendo un entrenador que dio mucho de qué hablar en el Deportivo Pasto en el segundo semestre de 2024, escuadra con la que estuvo metido en las finales del campeonato. Es por esto que, su fichaje por el cuadro ‘leopardo’ generó mucha expectativa y más aún recordando el debut del equipo en la Copa Libertadores.

A pesar de tener una gran ilusión para esta nueva temporada, Gustavo Florentín no tuvo buenas presentaciones con el Bucaramanga, por lo que las directivas del club tomaron la determinación de despedir a este técnico internacional. Después de su paso fatídico por el cuadro ‘leopardo’, este entrenador fue a parar a Águilas Doradas, conjunto que le abrió sus puertas nuevamente para el presente campeonato.

No lo esperaron

Con ya varias jornadas disputadas con Águilas Doradas, Gustavo Florentín habló de lo sucedido con Bucaramanga, equipo que no llegó a esperarlo, situación que terminó concretando su salida del equipo. De la misma manera, resaltó que es consciente que hay directivas que son más pacientes que otras, por lo que también entiende el punto del cuadro ‘leopardo’ al necesitar resultados positivos con urgencia.

Gustavo Florentín comentó en una de sus últimas entrevistas “tuvimos una racha de malos resultados que a la larga no nos ayudó para continuar con el proceso que estábamos realizando. Hacíamos muy buenos partidos, pero al final no ganábamos y el club necesitaba conseguir resultados inmediatos. El fútbol fue un poco cruel en ese lapso de Bucaramanga porque el buen trabajo no fue acompañado por los resultados”.

Por último, Gustavo Florentín dejó en claro que le hubiese gustado quedarse en la institución, en la que estaba seguro de que los buenos resultados iban a comenzar a llegar pronto. “Hay clubes que tienen más paciencia, pero yo entiendo los códigos que hay en esto. Me hubiese gustado continuar porque veíamos mejor al equipo, pero entendíamos la presión de la institución. Había una preocupación. Estoy con la conciencia tranquila”.