Por: Francy Agudelo • Colombia.com

Tibia sanción de la Dimayor a Emerson Moreno por agresión en el rostro a recogebolas

Fue sancionado con dos fechas de suspensión y una multa económica de 536 mil pesos “Por ser culpable de conducta violenta contra adversario”.
 

Foto: Instagram Deportivo Pereira
Foto: Instagram Deportivo Pereira

Fue sancionado con dos fechas de suspensión y una multa económica de 536 mil pesos “Por ser culpable de conducta violenta contra adversario”.
 

Atlético Bucaramanga se instaló en su primera final en el fútbol profesional colombiano luego de 75 años de historia y peleará por la primera estrella con Independiente Santa Fe. Su rival en la última fecha de la semifinal fue Deportivo Pereira a quien le ganó con el buen juego de manera contundente con un 3-1. 

Sin embargo, en medio de la gran fiesta que vivió el estadio Alfonso López, uno de los hechos que se robó las miradas de la transmisión del compromiso en vivo, fue la cachetada que Ederson Moreno, jugador del Deportivo Pereira, le propinó a un recogebolas del Bucaramanga. 

Sobre el minuto 85, en medio del compromiso detenido por una acción ocurrida previamente, Moreno, que recién había sido sustituido, le propinó un puñetazo en el rostro a uno de los asistentes que cumplen con la labor de recoger y devolver las esféricas en el terreno de juego, por fortuna, el central Carlos Betancur, no titubeó un segundo y le mostró la tarjeta roja a Ederson. 

Como era de esperarse, la Dimayor emitió el boletín de las sanciones de la última jornada y en ella figura Moreno, pero con una sanción que poco gusto en el mundo del fútbol y mucho menos a los implicados con el Atlético Bucaramanga, pues se considera injusto para la gravedad de la acción. 

Fue sancionado con dos fechas de suspensión y una multa económica de 536 mil pesos “Por ser culpable de conducta violenta contra adversario, Art. 63 literal d) del Código Disciplinario Único de la FCF”, figura en el comunicado de la División Mayor del Fútbol Colombiano. 

Por fortuna, en su momento los demás jugadores no se percataron de los hechos, pues se hubiera prestado para que el partido hubiera terminado en malos términos y se hubiera desdibujado la gran fiesta que se estaba viviendo.