El Bayern sufrió más de lo previsto en Copa de Alemania, con Díaz como protagonista sin marcar

El guion del Bayern de Múnich en su debut en la Copa de Alemania fue muy diferente al esperado. Lo que debía ser un trámite cómodo frente a un rival de tercera división terminó convertido en un examen exigente que solo se resolvió en el último minuto. Con Harry Kane como salvador y Luis Díaz como socio persistente en ataque, los bávaros sellaron un 3-2 con más sufrimiento que celebración.

El colombiano partió como titular en el frente ofensivo y desde el arranque mostró su intención de ser protagonista. Apenas al inicio, quedó mano a mano con el portero, pero su disparo fue contenido sin dificultad. A lo largo del primer tiempo generó constante peligro, aunque la precisión en la definición no lo acompañó. El momento de mayor frustración llegó a los 26 minutos, cuando un remate suyo fue despejado sobre la línea por un defensor, ahogando lo que parecía su primer gol en la competencia.

A pesar de no concretar, Díaz aportó movilidad, presión en campo rival y conexión con sus compañeros. En el complemento dispuso de otras dos opciones claras, pero el arquero del Wehen volvió a ganarle el duelo. Su recompensa llegó en el cierre, cuando lanzó el centro desde la izquierda que Harry Kane transformó en el 3-2 definitivo en el minuto 90+4.

El partido tuvo tintes de sorpresa. Bayern dominaba 2-0 con los tantos de Kane y Olise, pero el conjunto local reaccionó con coraje y empató gracias a Fatih Kaya, quien firmó un doblete en apenas seis minutos. Con el marcador igualado y un penal fallado por Kane, el fantasma de una eliminación temprana rondó sobre los dirigidos por Vincent Kompany.

Finalmente, el peso de las figuras inclinó la balanza. El gol agónico de Kane rescató al Bayern y le dio un pase a los dieciseisavos de final, instancia donde buscará retomar el camino de un torneo que no conquista desde hace cuatro años.

Para Luis Díaz, el duelo dejó un sabor agridulce: la falta de gol se sumó a su esfuerzo incansable, aunque su participación en la jugada clave confirma que su rol en el equipo crece jornada tras jornada. Su próxima oportunidad llegará este sábado, cuando los bávaros visiten al Augsburgo por la Bundesliga.