Por: Karen Benavides • Colombia.com

Coco, el perro que sufre de alcoholismo: ¿cómo llegó a esta adicción?

Cuando los veterinarios rescataron a Coco, se percataron de un terrible detalle: sufría de adicción al alcohol. Aquí te contamos cómo ha sido su recuperación.

Coco, el perro que sufre de alcoholismo: esta es su triste historia. Foto: Shutterstock
Coco, el perro que sufre de alcoholismo: esta es su triste historia. Foto: Shutterstock

Cuando los veterinarios rescataron a Coco, se percataron de un terrible detalle: sufría de adicción al alcohol. Aquí te contamos cómo ha sido su recuperación.

El alcoholismo consiste en “tener problemas para controlar lo que bebes, estar preocupado por el alcohol o continuar consumiéndolo aun cuando te causa problemas… implica la necesidad de tener que beber más para lograr el mismo efecto o la presencia de síntomas de abstinencia cuando disminuyes o suspendes rápidamente el consumo”, según explica Mayo Clinic.

Y aunque al escuchar dicho término lo relacionamos de forma inmediata con una condición que se presenta en el ser humano, un caso de este tipo en animales ha causado gran asombro y una profunda indignación; se trata de Coco, un perro labrador rescatado en Inglaterra que sufre de adicción al alcohol, motivo por el cual tuvo que ser sometido a una estricta rehabilitación.

El caso fue dado a conocer por la organización benéfica ‘Woodside Animal Welfare Trust’, la misma que se encargó de acoger a este canino luego de que su dueño falleciera y quedara en estado de abandono; tal como lo menciona en una publicación en su cuenta de Facebook, eran dos perros los que permanecían con este hombre y, tras ser evaluados por los veterinarios, determinaron que sufrían de alcoholismo, por los ataques de ansiedad que padecían ante la abstinencia.

Desafortunadamente, el compañero de Coco falleció por cuenta de los daños que se habían generad en su organismo; y a pesar de que el pequeño labrador sobrevivió, estaba gravemente enfermo y requería de atención las 24 horas del día, la cual recibió en la Unidad de Cuidados Especiales de Dunroamin.

De hecho, tuvo que pasar 4 semanas sedado para aminorar un poco los síntomas de la abstinencia y evitar que sufriera más ataques por la misma razón, hasta que finalmente estuvo fuera de peligro, dejó de depender de medicamentos para estar bien y superó la adicción a la peligrosa bebida a la que se había acostumbrado.

Por fortuna, la historia tiene un final feliz, pues Coco pudo salir de su alcoholismo gracias a la ayuda de los profesionales, y más adelante estará listo para encontrar una nueva familia que le brinde amor, pues aún debe permanecer un tiempo más en dicho lugar pues, aunque parece estar completamente recuperado físicamente, sigue estando muy ansioso mentalmente.

Sobre los hechos que lo habrían llevado a generar dicha adicción, para los veterinarios que trataron su caso sigue siendo una gran incógnita, pues no hay forma de saber cómo estos perros llegaron a tener interacción con el alcohol; sin embargo, se presume que podrían haber ingerido las bebidas que su dueño tenía en casa.