¿Cómo educar a un perro? 5 errores que jamás debes cometer

La crianza de las mascotas es como la de los niños, intentas hacer muchas cosas por su bien creyendo que es lo mejor, pero en realidad puedes estar equivocándote y cometiendo un error que será manifestado en algún comportamiento más adelante, en especial si se trata del primer animal que tienes en tu hogar, pues está claro que nadie nace aprendido.

Es por esta razón, que es necesario que te informes muy bien sobre la forma correcta de hacerlo para que poco a poco cojas experiencia y no termines arrepintiéndote en un futuro. Tu cachorro debe entender lo que está bien y lo que está mal, pero tú también debes tener en cuenta algunas cosas para garantizar su bienestar durante su crianza; por ende, en esta ocasión te traemos 5 errores que puedes estar cometiendo.

Castigos y regaños excesivos

Debes entender que la violencia jamás debe ser una opción, pues pegarle a tu perro cuando hace algo mal solo puede traumatizarlo y hasta volverlo más desobediente. Los cachorros por lo general son muy traviesos, pero para enseñarles lo que está mal basta con hablarles con un tono más grave y fuerte, encerrarlos por 2 o 3 minutos en algún lugar, o dejarlos atados un tiempo. 

Por otro lado, hay un aspecto que es muy importante que debes tener siempre en cuenta, se trata del momento en el que regañas a tu perro; siempre debe ser en el instante exacto en el que lo has encontrado haciendo algún mal, no algunas horas después, pues sencillamente no podrá entender la razón por la que lo estás castigando.

Tratarlo como un niño

Anteriormente te mencionamos que la crianza de un perro es como la de un niño, pero no te equivoques, no significa que debas tratarlo como tal, es parte de tu familia pero sigue siendo la mascota. Humanizar a los animales es uno de los errores más graves que puedes cometer, pues puede tener consecuencias en su comportamiento a futuro, como una mala relación con los de su especie; el perro come en su propia taza no en la mesa, y debe tener su propia cama.

Darle de tu comida cuando estás en la mesa

Con una sola vez que le des de tu comida mientras están en la mesa, él se acostumbrará a que siempre va a haber una posibilidad de que lo hagas, entonces estará pidiendo cada que te sientes a comer. Si quieres darle una golosina, debe ser en un lugar que no sea la mesa y en su propia taza, para que se acostumbre a que es allí donde va su comida.

Dejarlo mucho tiempo solo 

Sabemos que tienes responsabilidades que cumplir diariamente, como desplazarte a tu lugar de trabajo o hacer algunas vueltas, pero no es recomendable que dejes a tu perro mucho tiempo solo en casa, pues puede asustarse o hasta ponerse de mal genio, por lo que terminará haciendo travesuras. Si sabes que pasas mucho tiempo fuera de casa, lo recomendable son los hoteles para perro, los cuidadores, o incluso algún familiar que le haga compañía.

Regañarlo por su nombre

Ten en cuenta que tu perro está escuchando la misma palabra cuando lo llamas para que se acerque y cuando lo estás regañando, este es motivo suficiente para que se confunda; por esta razón es probable que termine asimilando siempre su nombre con un castigo. En su lugar, puedes utilizar palabras contundentes con un tono fuerte como “no” o cualquier otra corta que se te ocurra.