Conductas problemáticas de tu perro: identifícalas y aprende a corregirlas

Un correcto adiestramiento de tu perro es fundamental para evitar dolores de cabeza más adelante, o el sufrimiento de la mascota al tener que someterse a constantes regaños o castigos por no hacer las cosas de la forma correcta; es por esta razón que lo ideal es iniciar este proceso desde que es un cachorro o desde el momento en el que llega a casa.

De hecho, hay algunas conductas que están clasificadas dentro del grupo de “problemáticas” y son muy comunes en los canes; probablemente hayas notado alguna de ellas en tu mascota, motivo por el cual hoy queremos mostrarte la forma en la que debes manejarlas y cómo puedes darle solución para que no se convierta en un inconveniente mayor.

Morder tus cosas

Este es un comportamiento propio de los cachorros, aunque puede prolongarse hasta la adultez; debes enseñarlo a dejar de morder los muebles o tus cosas, mostrándole que no son de él. Para ello, necesitarás comprarle juguetes que pueda masticar y reprenderlo cada vez que decida coger otra cosa, redirigiéndolo nuevamente hacia lo que sí puede tomar entre sus dientes.

Robar o pedir de tu comida

Puede que para ti puede sea normal, pues terminas acostumbrándote, pero se convierte en algo molesto cuando hay visita en casa y tu perro les roba su comida o no se les quita de encima para que le den; para que deje de hacerlo, deben ignorarlo, apartarlo de la mesa, jamás darle comida en el lugar en el que consumen los alimentos las personas y reprenderlo cada vez que tenga esta conducta.

Saltar a tu cuerpo

Es normal que tu perro salte hacia tu cuerpo, muchas veces por emoción o porque quiere algo, sin embargo, esto se vuelve en algo malo cuando es muy frecuente, cuando tienes ropa clara que termina ensuciando o cuando es demasiado grande y el peso de sus patas lastima; enséñale que no debe hacerlo ignorándolo, empujándolo suavemente con la rodilla, sujetando su pata o volteándote.

Agresividad

No puedes permitir que tu perro se vuelva agresivo con otros perros o con las personas, para ello, debes hacer que el contacto sea cada vez más frecuente, no aislarlo, y no presionarlo para que se acerque, deja que lo haga a su propio ritmo; además, no debes fomentar los juegos bruscos, pues se acostumbrará a que esto está bien.

Tirar la cuerda

Si notas que tu perro tira la correa mientras lo estás paseando, por exceso de energía o porque quiere ansiosamente acercarse a algo, solo debes frenar sin tirar de la cuerda, solo impidiendo que avance más para que comprenda que debe calmarse; solo vuelve a avanzar cuando ya haya relajado la tensión. Además, siempre que lo saques, no dejes muy larga la correa, pues debe caminar justo a tu lado.