Fallece Lucio, el perro que fue enterrado vivo en Tolima

Una triste noticia se conoció recientemente, luego de que la página de Facebook ‘Solo Gente De Girardot’ confirmara que Lucio, el perro que días antes había sido enterrado vivo por un aparente “veterinario” inexperto, no pudo ganar la batalla y falleció el pasado martes, 15 de diciembre, a pesar de los esfuerzos de los expertos por salvarle la vida.

La salud del can no se encontraba en las mejores condiciones, tal como lo relata el portal, a raíz del cianuro y el varsol que le habían sido suministrados para sacrificarlo, tal como habían sido las recomendaciones de un hombre que se identificaba como “veterinario”, pero de quien se ha podido conocer que no posee tarjeta profesional y, por ende, tampoco experiencia para poner en sus manos la vida de un animal.

De hecho, explicaron que ya existen algunas denuncias en su contra, así como un proceso de investigación contra la familia del can. “ya se pasaron todas las denuncias para que se efectúe la respectiva demanda y para que hagan pagar a quienes le hicieron esto al perro, porque sí pedimos justicia. Necesitamos sentar un precedente en Flandes después de tanto abandono y tanto maltrato que hay”, explica en el video Harold Pico, representante del hogar de paso Dejando Huella, que fue el primero que brindó atención a Lucio cuando fue encontrado por las autoridades.

Y es que, este mismo hombre resalta que los índices de abandono y maltrato animal son cada vez más altos en Flandes, por lo que hace un llamado a las personas para llevar a cabo la tenencia responsable de mascotas. Además, para evitar que se sigan presentando casos como el de Lucio, Pico recomienda que cada que se requiera atención veterinaria, se verifique que el personal sea capacitado.

“Que esto sirva para que cada que lleven a sus animales al veterinario o soliciten un veterinario, pidan la tarjeta profesional. Lucio fue víctima de un falso veterinario y de la ignorancia humana” comenta en el mismo video Harold Pico.

El caso de Lucio

Lucio fue uno de los tantos animales que tienen que padecer sufrimiento por la ignorancia y la crueldad humana, pues fue enterrado vivo, luego de que un falso “veterinario” afirmara que la mejor opción era sacrificarlo y lo metiera bajo tierra sin percatarse de que aún continuaba con vida.

La familia de este can acudió a este hombre en busca de ayuda, al observar que su mascota no se encontraba bien de salud, sin embargo dicha persona hizo que perdieran la esperanza al expresar que no había ningún remedio para lo que estaba sufriendo, por lo que lo mejor era acabar su vida. Fue esta la razón por la que decidió suministrarle cianuro y varsol y luego enterrarlo.

Cuando dos agentes de la policía patrullaban por la zona escucharon los chillidos emitidos por Lucio, quien había logrado sacar su hocico y pedía ayuda al no poder mover su cuerpo; de inmediato lo trasladaron con Harold Pico para que una veterinaria lo atendiera y lo estabilizara, pues llegó con una elevada temperatura corporal, producto de una infección que fue provocada por las garrapatas; y aunque parecía estar avanzando, finalmente no logró ganar la batalla.