Más de 200 perros encerrados esperan que su carne sea subastada en Corea del Sur

Se trata de la Casa de Subastas Nakwon en Namyangju, en Corea del Sur, también conocida como “la casa del horror”, pues son más de 200 perros los que allí se encuentran encerrados y en deplorables condiciones a la espera de ser comprados, o mejor dicho, que su carne se subastada.

Dichas afirmaciones fueron hechas por un profesional de la ONG estadounidense Lady Freethinker, quien se infiltró en el lugar con el fin de investigar la actividad que allí se lleva a cabo; para ello, capturó una gran cantidad de videos y fotos como evidencia.

El material es muy claro, los animales que allí se encuentran permanecen cautivos en cajas y jaulas de metal, mientras demuestran con sus chillidos los episodios de dolor y terror por los que atraviesan al ser pinchados con un gancho de metal por el subastador.

En el tiempo que la persona infiltrada permaneció en el lugar se podía observar a toda una multitud de compradores adquiriendo diferentes tipos de perros; los más pequeños para consumo inmediato, y los más grandes como animales de cría, con el fin de que den a luz “a la próxima generación de cachorros inocentes atormentados y sacrificados para el cruel comercio de la carne” relata la organización en su página web.

Y es que el encierro prolongado al que son sometidos no es lo único que tienen que soportar estos animales, pues también son evidentes las condiciones de hacinamiento y suciedad en las que se encuentran. De hecho, las prácticas de sacrificio también resultan ser muy crueles, teniendo en cuenta que “los perros son ahorcados o electrocutados antes de ser masacrados”, agrega.

La casa de subastas

Según se explica en el informe realizado por estos profesionales, la casa de subastas Nakwon Auction House, ubicada en la ciudad de Namyangju, en Corea del Sur, es probablemente la mayor subasta de carne de perro que queda en dicho país.

De hecho, hacen referencia a su nombre y a su traducción pues, según afirma la ONG, la palabra Nakwon se refiere al “paraíso” en coreano, sin embargo, lo que estos animales deben vivir allí es completamente lo contrario. “Como muestran las inquietantes fotos, esta instalación es más una pesadilla que un paraíso para los perros atrapados dentro de la infernal instalación”, denuncia la organización.

La ONG resaltó, además, el hecho de que Corea del Sur sigue siendo el único país del mundo con granjas comerciales de perro a gran escala, y aunque la mayoría de las principales casas de subastas en dicho país han cerrado, se cree que Nakwon es la más grande que queda, operando en una zona residencial y anunciando sus servicios como un establecimiento de cría de canes.

Es por esta razón que LFT, en su lucha para poner fin al comercio de carne de perro en Corea del Sur, se encuentra recolectando firmas vía virtual, con el fin de solicitar a los líderes de dicho país poner fin a dicha práctica. “Nuestra petición tiene más de 88.000 firmas. Ayúdanos a alcanzar las 100.000 firmas para enviar el mensaje de que los perros se deben amar, no matar”, concluyen en el informe.