Por: Alexandra Mendez • Colombia.com

Conoce la historia de César: el perro con ansiedad que fue adoptado por más de 100 reclusos

Cesar es un canino de 10 años que  padece ansiedad por separación.

Perro con ansiedad fue adoptado por presos de una cárcel en Australia. Foto: Youtube Captura de video  El Mundo
Perro con ansiedad fue adoptado por presos de una cárcel en Australia. Foto: Youtube Captura de video El Mundo

Cesar es un canino de 10 años que  padece ansiedad por separación.

Los perros se han convertido en seres tan importantes para los humanos que ya no son solo mascotas, ahora también son considerados como animales de compañía, rescatistas, guardianes, de terapia y hasta ayudan en el ámbito de la medicina en la detección de enfermedades. 

En fechas recientes, se conoció la historia de un canino que llegó a una prisión de Australia para socializar con los reclusos y curar su ansiedad por separación. De acuerdo con información del periódico El Tiempo, el perrito fue adoptado por prisioneros del complejo de seguridad de Rison gracias al programa “cachorros en libertad” de un refugio de animales. 

Se trata de César, un canino de 10 años de edad que sufre de ansiedad por separación, lo que significa que si pasa más de 30 minutos solo comienza a llorar, a inquietarse y hasta puede tener ataques de pánico e histeria. 

La adopción de César fue posible gracias a la alianza que tiene el servicio penitenciario de Tasmania con el hogar de perros de la misma ciudad que trabaja día a día para darle un hogar a los animales en condición de calle.

La entidad tiene un programa que busca que los animales puedan socializar con los presos para prepararlos para estar en convivencia con más personas y en un futuro puedan ser adoptados sin ningún inconveniente.

Durante una de las jornadas del programa se dieron cuenta de que el perro de mediano tamaño y de color negro no podía pasar demasiado tiempo solo sin sufrir un estrés intenso, por lo que los presos decidieron reunir con ayuda del adiestrador un total de 9,500 dólares para adoptarlo y ayudar con su sostenimiento en la cárcel.

Con este dinero, se le prestó la atención veterinaria necesaria y se le compró comida suficiente para alimentarlo por un buen tiempo dentro del centro carcelario. César ahora es custodiado por más de 100 reclusos, quienes le brindan el amor y los cuidados especiales que requiere por ser un perro de edad avanzada.

“Los privados de la libertad de la cárcel Rison están pendientes del cuidado y le dan toda la atención que necesita”, dijo uno de los guardias de seguridad del centro carcelario en entrevista para el ABC News. 

César se ha convertido en un miembro más de la familia de los 100 reclusos que cumplen sus condenas en dicho centro penitenciario. Muchos afirman que esta acción los dignifica y hace sentir buenas personas, independientemente de las razones por las que se encuentran privados de la libertad.