Por una tormenta, perro intentó saltar desde un décimo piso y quedó colgando

Los sonidos fuertes, como los producidos por la pirotecnia o las tormentas, pueden ser comunes y normales para los seres humanos, pero no son percibidos de la misma manera por los perros, teniendo en cuenta que sus sentidos son mucho más desarrollados que los de las personas; de hecho, estos seres pueden escucharlo mucho más elevado o cercano de lo que realmente es.

Es por esta razón que, por lo general, ante un estímulo de estos los caninos tienden a esconderse, mostrar un profundo miedo o incluso a desesperarse al pensar que se trata de algo que pone en peligro su vida; y es esto, precisamente, lo que sucedió con un perro en un barrio de Brasil, que no encontró más remedio que lanzarse por la ventana ante una incontrolable tormenta eléctrica.

Los hechos se dieron en la zona de San José dos Campos, en Brasil, el pasado lunes, 04 de octubre, mientras el animal se encontraba solo en un apartamento ubicado en el décimo piso; en medio del miedo, este perro intentó escapar por la ventana, sin importar la altura a la que se encontraba pero, por fortuna, sus patas traseras quedaron enredadas en una malla de seguridad que se encontraba instalada allí.

Personas que residen en el mismo sector lograron captar en video todo lo sucedido, en el cual se puede observar que el canino intenta retroceder al ver el peligro al cual está expuesto, pero no tiene éxito, por lo que queda colgando; esta grabación fue compartida en la plataforma YouTube, donde ya cuenta con más de 14 mil visualizaciones, y ha generado un gran impacto en los usuarios.

Mientras estos seres registraban la situación, algunos otros individuos se ubicaban en la parte de abajo con una sábana extendida, en caso de que el perro cayera, para salvarle la vida. Asimismo, otros vecinos intentaban derribar la puerta de la vivienda para agarrar a la mascota que ya se encontraba desesperada en dicha ventana y que estaba a punto de caer, lo que habría provocado su muerte al ser una gran altura; sin embargo, nunca pudieron ingresar.

Por fortuna, el vigilante de la edificación logró contactarse con la mujer que vive en dicho apartamento y que es la dueña del can, quien aparentemente sería una enfermera que se encontraba de turno; la propietaria llegó en tiempo récord, pues tan solo tardó 20 minutos en volver a casa desde su trabajo; entró a su hogar, tomó a su amigo peludo de cuatro patas y evitó una tragedia.