Karol G y +57: Admiten la tutela que tiene en la mira a los 'duros' del reguetón y busca eliminar la canción
+57, la canción de Karol G, sigue en el ojo del huracán y los cantantes ya están entutelados con el fin de que la bloqueen o eliminen de las plataformas.
+57, la canción de Karol G, sigue en el ojo del huracán y los cantantes ya están entutelados con el fin de que la bloqueen o eliminen de las plataformas.
Un juez de Medellín aceptó una tutela presentada por Iván de Jesús Prada Camaño para modificar o bloquear la canción llamada +57, interpretada por Karol G, J Balvin, Maluma, Ryan Castro, Blessd y DFZM y es que las criticas y la polémica han llegado hasta este punto luego de que muchos aseguren que la canción promueve la violencia contra menores y el consumo de sustancias.
Según el demandante, las autoridades, como la Defensoría del Pueblo, el ICBF y el alcalde de Medellín, no han logrado, a pesar de las críticas, tomar medidas concretas para proteger los derechos de los menores y menciona en el documento que “las mujeres son objetivadas y sometidas a un esquema de control en lugar de ser vistas como iguales”.
Uno de los puntos clave de la tutela menciona declaraciones de Astrid Eliana Cáceres, la directora del ICBF, quien expresó su preocupación sobre cómo la canción podría influir negativamente en los jóvenes. En la tutela aseguran que este tipo de música y estas canciones podrían incitar a los menores de edad llevar a conductas inapropiadas, como apagar el celular durante encuentros íntimos, algo que se menciona en la letra.
Prada también critica a las autoridades por limitarse a rechazar la canción públicamente sin tomar acciones contundentes para evitar su difusión y es que según él, las críticas solo han hecho que más personas lleguen a escuchar la canción, dándole más visibilidad y popularidad, así sea únicamente por curiosidad.
En su solicitud, el demandante afirma que la canción refuerza una cultura machista, por lo que su solicitud hacia los cantantes es que la canción esté bloqueada o prohibida y acciones legales para proteger a los niños y adolescentes de este tipo de contenido, pero habrá que ver como termina, ya que el caso resalta un conflicto entre la libertad de expresión en la música y la protección de los derechos de los niños y adolescentes.