Estas son algunas señales de emergencia de un medio ambiente en cuidados intensivos

Cuando hablamos de cuidados intensivos nos referimos a un paciente que se encuentra en un delicado estado de salud y del cual se teme por su vida, sin embargo, los cuidados y atención médica que se le prestan son una ayuda vital que le puede devolver bienestar.

El mundo se encuentra enfermo de muerte y hablar de cuidados intensivos puede parecer idealista porque sencillamente no prestamos atención y aunque se nos advierta, y de seguir con nuestra indiferencia, empezaremos a ver como llega a su fin, así parezca una afirmación exagerada o apocalíptica, pero es una dura realidad.

La pandemia provocada por el coronavirus ha puesto en evidencia la fragilidad de la vida humana pero también la de nuestro planeta, que ya no marcha normalmente sino con un motor recalentado y a punto de estallar; se habla mucho, se actúa poco, muy poco y por eso que queremos dar a conocer algunas de las señales de emergencia de un medio ambiente muy enfermo.

Septiembre, el año más caluroso de la historia

Esto no es producto del azar sino del calentamiento global que cada vez es más intenso y alcanza a todas las zonas del mundo, además los registros indican que el 2020 de terminar así, sería el año más caluroso de la historia, después del 2016.

Corales australianos se redujeron a la mitad

El calentamiento global en 25 años ha reducido a la mitad a la gran barrera de coral australiana, considerada como la especie viviente más grande del planeta por ser el hogar de peces, moluscos, tiburones, ballenas y todos los microorganismos necesarios para el equilibrio natural.

Casi la mitad de la amazonia a punto de desaparecer

Estudios científicos afirman que un 40% de las selvas amazónicas podrían convertirse en sabanas debido a que las luvias comienzan a escasear por el efecto invernadero y sus tóxicas emisiones.

Los desastres naturales son pan de cada día

En los últimos 20 años el mundo ha sufrido un 80% más de desastres naturales que en años anteriores a las dos décadas, el calentamiento global las altas temperaturas, los duros inviernos y la actividad sísmica se han incrementado dramáticamente.

La contaminación del aire siga en aumento

Los vehículos impulsados con combustibles fósiles siguen siendo un dolor de cabeza y la producción de modelos alternativos no es significativa, además los vehículos tipo SUV, camionetas familiares de mayor consumo de gasolina debido a su peso que sobrepasa en 200 kilos al promedio.

El plástico sigue siendo el rey

Este planeta no debería llamarse tierra sino plástico. Este elemento terminará por ahogarnos si no lo desterramos de nuestras costumbres, actualmente los ríos, los mares y hasta campos enteros están invadidos por él.