Celulares vs Socialización: 75% de los colombianos prefieren sus dispositivos móviles

Para los expertos, la conversación es uno de los primeros pasos en la creación de relaciones sociales, las cuales son de mucha importancia para el crecimiento humano de una persona o un grupo de éstas.

Sin embargo, ya hace 19 años que llegó el siglo XXI y con este una nueva forma de alejar los silencios incómodos o, simplemente, a las demás personas: los dispositivos tecnológicos.

Aunque, en un principio, las nuevas tecnologías como el celular o el internet nacieron con la necesidad y meta de conectar a las personas, la unión de ambas (smartphone) terminó haciendo todo lo contrario. 

Por ejemplo, en el caso colombiano, Kaspersky Lab mostró datos un poco desalentadores en cuanto a este tema. Por medio de una encuesta a nivel nacional, la compañía dedicada a la seguridad informática dio a conocer que para el 75% de la población colombiana, el celular es su mejor aliado en la tarea de ignorar a otra persona.

La dinámica es sencilla: se acerca alguien a donde usted está con intención de entablar una conversación, acción que le puede ser algo tedioso o aburridor. Pues, simplemente, antes de que el otro cumpla su objetivo, su mano ya está sobre el móvil y, acción seguida, sus ojos hacen lo mismo. Ante su explícito desdén por conversar con esa otra persona, la misma sigue su camino. Objetivo cumplido.

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¿Un superhéroe?

Ahora bien, los colombianos no solo ignoran a las personas por medio del celular, con el fin de rechazarlas, sino por la necesidad de salir de situaciones embarazosas o difíciles. Según Kaspersky Lab, el 68% de las personas que tienen celular en Colombia lo usan como un ‘salvavidas’ o ‘capa de invisibilidad’ que les ayude a evitar aquellos momentos en que los nervios podrían pasar una  mala jugada.

Asimismo, la investigación explica que tal es el miedo de algunas personas por la interacción humana, que el 28% prefiere hacer tareas cotidianas como pedir indicaciones para ir a algún lugar, por medio de su dispositivo móvil. Es así que, Google Maps o Waze se han convertido en los mejores amigos de aquellos que no se saben ubicar muy bien en la ciudad.

El ‘Phubbing’

No obstante, como casi todo en la era ‘Milennial’ esta situación ya se ha determinado como una problemática social, que, por supuesto, ya tiene su propio nombre: ‘phubbing’. Naciente de la combinación entre ‘phone’ (teléfono) y ‘snibbing’ (desairar), el ‘phubbing’ es la palabra que recoge el hecho de ignorar a los demás con el celular.

Pero, con la palabra, también nació un proyecto para contrarrestar este problema: el ‘anti phubbing’. La idea se creó en Australia y tiene como  fin deshacer la autoridad que el celular ha creado sobre el ser humano. Para la magíster en Terapia Familiar Sistémica, Gisela Echeverría, en conversación con El País, de Cali, “las facilidades que ofrecen los maravillosos smartphones están significando una serie de dificultades en las relaciones, pues captan toda la atención de quien los usa, porque son llevados a los espacios más íntimos: la cama, la mesa, el baño, etc”.

En consecuencia, las personas se están instalando en mundos irreales que no tienen en cuenta el contacto humano, ni las sensaciones o sentimientos derivados del mismo. En pocas palabras, se está olvidando lo que es vivir en comunidad, por el simple hecho de ignorar la vida real con la ayuda de dispositivos virtuales.

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